Si hay un argumento que pesa en un lado y otro de la balanza, en el debate soberanista de Catalunya, es el económico. El gobernador del Banco de España, Luis María Linde ha añadido hoy un peso. Y es que como ha explicado durante su intervención en el Foro ABC-Deloitte, si un territorio de un país de la zona euro se independiza y sale de la zona, queda fuera del amparo del BCE. El Banco Central Europeo sólo presta a entidades del espacio europeo, y Catalunya quedaría fuera de la Unión Europea y de la eurozona.
De hecho, no es la primera vez que se hace este tipo de advertencia, desde una institución. Hace unas semanas, el Vicepresidente de la Comisión Europea, Joaquin Almunia, aseguró que Catalunya no sería aceptada por Europa si se independiza.
Sin embargo, el gobernador del supervisor financiero ha confiado en que el proceso soberanista catalán se pueda resolver «con tranquilidad» y en que la situación se pueda controlar en el futuro.
Linde también ha recordado que sus previsiones contemplan un incremento del PIB del 1,2% este año y del 1,7% en 2015, unas cifras que suponen un «swing importante» para la economía española. «Firmaría ahora mismo por la garantía de crecer al 1,2%», ha dicho.
Estas cifras, según Linde, permitirán «sin duda» que se destruya menos empleo y que se creen puestos de trabajo, gracias también al «positivo» efecto de la reforma laboral, que ha tenido una buena incidencia en el mercado de trabajo a pesar de que tendrá que ser «retocada o mejorada» en algún momento.
A su parecer, la reforma está «bien orientada» en términos generales, aunque habrá que perfilar mejor «algunos agujeros» de los que hablan los expertos para mejorar su incidencia en el mercado de trabajo.
Preguntado por si ha llegado el momento de mejorar los salarios, el gobernador ha considerado aún «necesaria» la moderación salarial, ya que no hay un crecimiento de la productividad que justifique esta mejora y el nivel de precios sigue bajo.
Según Linde, la subida salarial está «poco justificada» en un contexto de precios como el actual y la moderación sigue siendo necesaria tanto este año como el próximo, aunque puede ser «modulada» en algunos sectores.
En este sentido, ha recordado que una de las ideas básicas de la reforma laboral es que los salarios crezcan en función de las empresas y los sectores y no de forma «indiscriminada», que será la norma a aplicar en el futuro.
Preguntado por si le parece bien que los jueces resuelvan los expedientes de regulación de las empresas, el gobernador ha dicho que la gestión de las empresas debería quedarse en el ámbito empresarial, puesto que son las compañías las que saben si pueden ampliar o no su plantilla o su capacidad de invertir.
DÉFICIT BASTANTE AJUSTADO
En materia de déficit, ha dicho que el Banco de España cree que el saldo negativo de las administraciones públicas cerró el 2013 en el 6,6% (7,1% si se tienen en cuenta las ayudas a la banca), lo que supone sólo una desviación de una décima respecto a lo pactado con Bruselas.
«No me parece una desviación grave», ha señalado, tras recordar que la economía cayó un 1,2% el año pasado, por lo que el 6,6% supone un cumplimiento «bastante ajustado».
REFORMA FISCAL
Preguntado por la propuesta de los expertos sobre la reforma fiscal, Linde se ha limitado a decir que cualquier reforma debe estimular el ahorro, la formación bruta de capital y ayudar a afrontar el problema de las pensiones.
En este sentido, ha considerado «imprescindible» el sistema de reparto actual, pero ha aseverado que podría complementarse con un sistema de ahorro privado dotado de más estímulos a través de la reforma fiscal.
En concreto, preguntado por si es necesario realizar cambios en el IVA como reclaman los expertos, el gobernador ha asegurado que lo que debería hacerse es reducir el fraude que rodea al impuesto.