El calendario judío se basa en los movimientos de la luna y del sol: la luna determina los meses y el sol los años. En este calendario, el día empieza al anochecer, hay 12 meses de 29 ó 30 días cada uno y cada tres años uno es bisiesto, para asegurar que cada fiesta se celebra en la estación correspondiente.
El calendario gregoriano, por su parte, que usan en la actualidad la mayoría de los países occidentales, fue establecido por el Papa Gregorio VIII en 1582 y está basado en el movimiento solar. Para saber en qué año están los judíos, basta sumar 3.761 años al occidental.
En el libro del Éxodo, el autor anónimo de la Biblia narra la liberación del pueblo de Israel del yugo de Egipto liderada por Moisés. En su capítulo 12 se narra cómo Dios estableció el orden de los meses designando el de Nisán (‘Abib’) como el primero del año, para conmemorar la liberación de su pueblo y la Pascua (‘paso’), recuerdo del ángel exterminador que “pasó” matando a los primogénitos egipcios y dejando con vida a los israelitas.
Este fue el primer calendario que usó el pueblo judío para fijar sus fiestas. En tiempos de Jesús había un segundo calendario de uso civil u oficial que comenzaba con el mes de Tisri, cuyo primer día era el Año Nuevo civil o Rosh Hashaná, que continúa vigente hasta hoy.
Babilonia dio nombre a los meses
A través de los siglos, los nombres de los meses y el procedimiento para fijar el calendario han cambiado. Después de los 70 años de exilio en Babilonia (586-516 a.C.), los nombres de los meses cambiaron por influjo de dicha lengua y han quedado así fijados en el calendario judío actual.
Dicho calendario actualmente se basa en cálculos astronómicos de gran precisión, pero no era así en la antigüedad. Durante siglos, se determinaba cada mes a partir de la luna nueva.
¿Cuáles son los orígenes de esta calendario?
En el registro bíblico se determinan tres de las razones para establecer este calendario:
«Para separar el día de la noche» (Gén. 1:14)
Para que «sirvan de señales para las estaciones, días y años» (Gén. 1:14).
«Para alumbrar sobre la tierra» (Gén. 1:15)
Para que señoreasen en el día y en la noche (Gén. 1:16)
Así es la regulación del calendario:
Días. En sus comienzos, el calendario hebreo no se regía técnicamente por veinticuatro horas, tal como nosotros lo hacemos hoy en día, sino por la observación del ocaso del sol (éreb: crepúsculo, atardecer) y el ocaso del día siguiente («fue la tarde/éreb y la mañana/boquer del día»). Hoy se practica una combinación de ambos, pues para ciertos momentos específicos, es importante observar el momento exacto de la caída del sol (sábados, Pascua, etc).
Semanas. En la Biblia, el pueblo de Dios contaba siete días, lo cual llamaban una semana, basados como dijimos en los actos de creación de Dios, en el que consagró y bendijo el séptimo día, como día de reposo (Gén. 2:1-3; Éx. 16:23-26; 20:8-11). Así, en el calendario hebreo hay seis días laborales y uno de reposo para descansar y meditar en Dios y en Sus obras. De los siete días de la semana solamente el séptimo tenía nombre: Shabbat (descanso, reposo, sábado), los demás eran nombrados por su orden en la semana: primero/rishón, segundo/sheni, tercero/shlishi, cuarto/revi»i, quinto/chamishi y sexto/shishi.
Meses. El conteo de los meses en el calendario bíblico se basa en el ciclo lunar (aproximadamente 29 días y medio; Sal. 104:19) y éstos ese contaban con la salida de la luna nueva en cada mes, y por eso podremos observar que en este calendario se cuentan meses con 29 y 30 días de manera intercalada. Al igual que los días, la mayoría de los meses no tenían nombres específicos, sino que eran nombrados por su orden durante el año. Los actuales nombres de los meses del calendario hebreo son en su mayoría de origen pagano-babilónico.
Nombres de los meses en hebrero
SEPTIEMBRE ELUL- TISHRÍ (inicio del año)
OCTUBRE TISHRÍ- HESHVÁN
NOVIEMBRE HESHVÁN- KISLEV
DICIEMBRE KISLEV- TEVET
ENERO TEVET- SHEVAT
FEBRERO SHEVAT-ADAR
MARZO ADAR – NISÁN
ABRIL NISÁN- IYAR
MAYO IYAR – SIVAN
JUNIO SIVÁN – TAMUZ
JULIO TAMUZ – AV
AGOSTO AV – ELUL
SEPTIEMBRE ELUL-TISHRÍ (fin de año)