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Optimizar el gasto es una de las labores más importantes a la hora de gestionar un negocio. Si hay algo inevitable en cualquier empresa, es sin duda el gasto energético. En la actualidad, existen diversas opciones para tener energía tanto en los hogares como en las oficinas, e incluso en las fábricas. Entre las más habituales, el gas, la luz y la energía solar.
Hay muchas empresas que comercializan estas energías, algunas las ofrecen por separado y otras de forma conjunta, pero ¿cómo saber qué opción es la más beneficiosa para tu negocio?, ¿cómo saber si es mejor, por ejemplo, optar por una solución de energía solar para empresas o por una de gas natural? Te vamos a ayudar a salir de dudas.
Encontrando la mejor opción energética para tu negocio
Para tomar una decisión con fundamento te recomendamos que, primeramente, analices el consumo energético de tu centro de trabajo. Examina las facturas que pagas en la actualidad y realiza una auditoría para ver qué puedes recortar y qué opción energética encaja mejor con el gasto de tu negocio. Después, valora las distintas alternativas disponibles en el mercado y cuenta siempre con el asesoramiento de agentes especializados.
Dicho lo cual, debes saber que la sostenibilidad es un elemento de suma importancia de cara al futuro, y que apostar por medidas sostenibles se está volviendo cada vez más necesario. Por eso, existen ayudas y subvenciones a las empresas que deciden pasarse a la energía solar. Un incentivo más en un país, como España, que supera los 300 días de sol al año y cuenta con una media de, aproximadamente, 2500 horas de sol anuales. Lo que, sin duda, convierten a nuestro país en un lugar idóneo para la instalación de placas solares.
Es cierto que una instalación solar para tu negocio puede tener un coste inicial elevado, pero las ayudas y subvenciones amortiguan ese coste, y una vez amortizada la inversión ya no volverás a pagar por la energía que consumes. Aunque a fecha 31 de diciembre de 2023 la subvención de placas solares del programa Next Generation ha llegado a su fin, muchas administraciones autonómicas y locales siguen proporcionando ayudas. Además, existen excepciones fiscales (bonificaciones en el IBI, deducciones en el Impuesto de Sociedades…) para las empresas que hayan invertido en el aprovechamiento de la energía solar y comercializadoras que financian al 100 % tu instalación fotovoltaica.
Por si todo lo anterior no fuera suficiente, no debes olvidar que optar por la energía solar reduce el impacto ambiental y las emisiones de CO2, y refuerza y mejora tu imagen empresarial.