Según el periódico International Herald Tribune, prestigiosas escuelas de educación superior estadounidense se están sumando a la iniciativa de los cursos online. Coursera es una de las empresas que está potenciando este cambio. En otoño esperan ofrecer más de 100 cursos para llegar a estudiantes de todo el mundo.
Antes de expandirse, Daphne Koller y Andrew Ng, los fundadores de Cousera, dijeron que se habían inscrito 680.000 alumnos en 43 cursos de socios, la Universidad de Michigan, Priceton, Standford y la de Pennsylvania.
Actualmente, se han sumado numerosas universidades estadounidenses y extranjeras.
Algunas de ellas ofrecen créditos
Richard A.DeMillo, director del Vigésimoprimer Centenario de las Universidades de Georgia Tech, afirmó que «es algo tan nuevo que todo el mundo se siente atraído por ello y no puedo imaginar que una universidad de prestigio no quiera estar involucrada en este proyecto».
Debido a los avances tecnológicos los MOOC (de sus siglas en inglés, Curso Online Abierto y Masivo) podrían abrir las puertas a millones de personas a la educación superior.
Hasta ahora, la mayoría de los MOOC eran cubiertos por informáticos, matemáticos e ingenieros, pero Coursera se expande a áreas como la medicina, la literatura y la historia. Los MOOC eran desconocidos hasta el año pasado, cuando se le dio una gran publicidad gracias a un curso online ofrecido por la Universidad de Stanford de inteligencia artificial.
Los MOOC, hasta el momento, no han ofrecido ningún crédito, sin embargo, la Universidad de Washington ha informado de que tiene planeado ofrecer créditos para los cursos de Coursera durante este otoño, y otras empresas online también están barajando la opción.
Los profesores han pensado en ofrecer a los estudiantes materiales online y que estudien la teoría y, después, asistan a clase para realizar proyectos interactivos y poder resolver todas sus dudas.
A pesar de todo esto, Thrun, maestro de los MOOC, advirtió que los cursos aún están en fase experimental. «Creo que nos estamos apresurando un poco. Aún no he visto ningún estudio que demuestre que el aprendizaje en línea sea tan bueno como cualquier otro tipo de enseñanza».
Aproximadamente dos tercios de los estudiantes son extranjeros y cada curso atrae a decenas de miles de estudiantes. Además, los contratos Coursera no son excluyentes, por lo que muchas universidades asociadas están negociando también con varias asociaciones educativas online.
El problema que surge es poder hacer trampas
Antonio Rangel, profesor de Caltech, que enseñará en otoño los Principios de Economía para científicos, dijo que ofrecería créditos a aquellos alumnos que realicen las tareas y los exámenes adecuadamente y que, para asegurarse de ello, tendrían que pagar 80 $ para evaluarse en los centros asignados.
Finalmente, se tiene planeado entregar al estudiante que finalice el curso un diploma.