Esta petición surge debido a los problemas que se crean ante la imposibilidad de identificar su procedencia o propietario y de salud pública y cobra actualidad tras el hallazgo de una serpiente en la calle de Sant Miquel, en Palma.
En este sentido, la presidenta de la Associació Empresarial de Clíniques i Veterinaris d»Animals de Companyia, Delia Saleno, ha afirmado que «muchas de las especies exóticas están protegidas en sus países de origen y entran de forma irregular en España y Baleares, vendiéndose en establecimientos de forma incontrolada».
Por ello, la propuesta de EMVETIB es que las especies autorizadas vayan «con el microchip puesto y con documentación de presencia y destino», ha afirmado Saleno quien además ha aseverado que «cuando uno o varios de estos animales se escapan, además de poder ser peligrosos para las personas y animales domésticos, suponen un peligro para el medioambiente».