Se trata de una segunda fase, ya que en 2012, a través de las obras del ARCH (Área de Rehabilitación del Casco Histórico) se actúo en los sillares de la parte inferior de la muralla, que presentaban un enorme desgaste, «lo que suponía riesgo de hundimiento».
En ese momento, se elaboró un estudio completo del estado de la muralla en la calle Alfara en el que se detectó la necesidad de una actuación más completa, tanto en los sillares de la parte baja como alta de la muralla.
Por ello, esta segunda fase de las obras va a permitir consolidar de manera definitiva este tramo de la antigua muralla de la calle Alfara, ha indicado el consistorio turiasonense en una nota de prensa.