«No se sabe lo que le molesta al Gobierno de Colau, que sea un acto de reconciliación de todas las víctimas de distintos bandos, la celebración de una misa, o ambas cosas», ha informado a Europa Press.
Ha resaltado que «en los últimos 35 años de democracia esta misa se ha celebrado con absoluta normalidad y discreción, sin ningún tipo de polémica, ya que nadie puso reparo: ni los gobiernos tripartitos, de los que ICV formaba parte, ni en los últimos cuatro años con CiU».
Critica que el Gobierno municipal ha querido interpretar lo que Fernández ve como una iniciativa en recuerdo desde la conciliación de los difuntos de la Guerra Civil como un «acto de exaltación y confrontación».
El tercer teniente de alcalde y concejal del distrito de Sants-Montjuïc, Jaume Asens, explicó este miércoles que el Ayuntamiento no había autorizado la misa porque considera que puede contravenir la Ley de memoria histórica, por la que las administraciones no pueden conmemorar el levantamiento militar.