La Policía Nacional de Colombia está cerca de comenzar a emplear la primera camada de ratas entrenadas para la detección de explosivos. Aunque son los perros los animales más usados para esta tarea, Colombia se ha apuntado a una nueva tendencia que apuesta por usar roedores en los campos sembrados de minas del país.
En el denominado Proyecto RATTUS, los responsables policiales colombianos han optado por las ventajas de estos animalitos, que son varias, destacando su bajo peso -no hacen explotar las minas cuando las encuentran-, su poco gasto de agua y alimento, así como su gran olfato.
Tras un período de 5 años de entrenamiento en ambientes controlados, la primera camada de roedores ya está preparada para realizar su labor. El entrenamiento -explican los responsable- es similar al que se lleva a cabo con perros, incluyendo dinámicas para que las ratas se acostumbran al contacto con los humanos, pierdan temor a sus naturales depredadores, y sean capaces de moverse en espacios abiertos.
Las ratas entrenadas son capaces de detectar y marca hasta siete sustancias explosivas: anfo, pólvora negra, C4, cordón detonante, pentolita, TNT y amonal. Además, como mamíferos, son capaces de transmitir los conocimientos de generación en generación.
La primera camada de ratas que podrán operar en situación real son la cuarta generación de ratas entrenadas, y ya alcanzan una fiabilidad superior al 90% en su trabajo de desminado.