En rueda de prensa en la sede del partido en Ferraz, Sánchez ha advertido de que «las bases de Podemos no pueden hacer de jueces sobre la coherencia y la credibilidad de sus líderes, en todo caso serán testigos pero nunca jueces».
Las palabras de Sánchez llegan el mismo día en que varios dirigentes de Podemos, tanto a nivel estatal como autonómico, se han sumado a las críticas que el pasado viernes manifestó el alcalde de Cádiz, José María González ‘Kichi’, que advirtió de que el Código Ético de la formación impone a los representantes de Podemos vivir como la gente corriente para poder representarla en las instituciones.
Estas críticas han arreciado además con la decisión que tomaron Iglesias y Montero de convocar a las bases a una consulta para que sean sus militantes los que decidan si su credibilidad y su coherencia se ha visto comprometida por esta operación inmobiliaria.
En los últimos días el PSOE se había limitado a señalar que correspondía a los votantes de Podemos valorar si la compra del chalé por parte de Iglesias y Montero es un ejercicio o no de incoherencia con respecto a su discurso político.