La panorámica es incuestionable. En la Puerta del Sol no cabía ni un almas más. Miles de personas se han concentrado en la céntrica plaza madrileña, epicentro en su día del 15-M, en el marco de la »Marcha del Cambio» con la que Podemos pretende exhibir su fuerza en un año electoral. La manifestación ha arrancado con gritos de «Sí se puede» o «Se nota se siente, Pablo presidente«.
Personas de toda edad y perteneciente a diferentes movimientos sociales, sindicales y partidos -asisten miembros de PSOE, IU, CCOO y UGT– se han dado cita en el centro de la capital para exigir un cambio político en España y expulsar a la «casta». «A por ellos«, se escuchaba con tono desafiante desde las gargantas de los asistentes.
Según fuentes policiales, informa la agencia Efe, la marcha ha podido estar secundada por cerca de 100.000 personas. Desde Podemos aseguran que la cifra que barajan es de 500.000 manifestantes.
Los manifestantes concurrían por la Calle de Alcalá hacia la Puerta del Sol, en donde concluirá la marcha con la intervención del líder de Podemos, Pablo Iglesias. A escasos 20 minutos de que diera comienzo la marcha, la Puerta del Sol presentaba ya una imagen abarrotada.
Aunque los mimbros de »Podemos» se han encargado de matizar las diferencias con su hermano griego »Syriza», en una semana en la que Grecia ha experimentado un cambio político en su gobierno, las pancartas a favor del partido de Tsipras y las banderas griegas han ondeado en esta mañana helada en la capital.
En un ambiente festivo y soleado, muchos de los asistentes portaban banderas de Podemos, republicanas, así como pancartas en las que se rechaza el bipartidismo del PP Y PSOE, y la troika.
Antes de arrancar la manifestación, el »número dos» de Podemos, Íñigo Errejón, ha asegurado que tras esta marcha el «siguiente hito» será La Moncloa.
Al término de la marcha, Iglesias ha estado arropado por la plana mayor de su equipo en la «emblemática» plaza de la Puerta del Sol, simbolismo de las concentraciones protagonizadas por el movimiento »15M».
Una marcha para exigir un cambio político
Aunque desde los orígenes de Podemos, sus dirigentes han evitado con insistencia erigirse como representantes del 15-M, no cabe duda de que buena parte de los “indignados” que hace tres años y medio protagonizaron aquel movimiento se declaran ahora afines al partido de Iglesias.
Por ello, el hecho de que la marcha, convocada para mañana, tenga su punto de término en la Puerta del Sol alberga aún más simbolismo. Los propios dirigentes de Podemos han reconocido que la elección no ha sido casual, «ha sido históricamente un espacio simbólico del cambio político en España», han expresado, y es por eso que quieren que el «cambio» que aspiran a protagonizar en 2015 pase también por allí.
La Puerta del Sol fue también escenario de la proclamación de la segunda Replública, el 14 de abril de 1931. La marcha no tiene ningún objeto de protesta. Simplemente, señalan sus dirigentes, se trata de demostrar que el 2015 “será el año del cambio político en España”,y que es ahora el momento de desalojar del poder a la “casta del régimen del 78”. «Es una movilización para decir que en 2015 va a haber un Gobierno de la gente», expresó el secretario general, Pablo Iglesias, a principios de mes, «Queremos que sea una movilización histórica, que la gente pueda decir a sus hijos y a sus nietos: »Yo estuve allíel 31 de enero en la marcha por el cambio, que abrió un ciclo de cambio político en España».