«Estamos mirando hacia adelante», ha declarado Seehofer, quien encabeza la Unión Social Cristiana (CSU) de Baviera, en comentarios publicados en la versión dominical del periódico ‘Bild’.
«Siempre digo que el parabrisas es más grande que el espejo retrovisor. Ese es el principio que siempre hemos sostenido», ha dicho Seehofer, quien parecía preparado hace apenas unas semanas para renunciar o derrocar a la coalición, que incluye a la Unión Demócrata Cristiana (CDU) de centroderecha de la canciller y a los Socialdemócratas de centro izquierda (SPD).
Durante la pelea, provocada por Seehofer al exigir que Alemania rechace a los solicitantes de asilo en sus fronteras, el ministro llegó incluso a debilitar la figura de Merkel al asegurar que nunca renunciaría a su cargo por la misma canciller a la que aupó al poder.
Las partes llegaron a un acuerdo el jueves por la noche, aunque los detalles no están claros. Parece que los solicitantes de asilo serán detenidos en la frontera y enviados de regreso a otros países de la UE si están registrados allí. Sin embargo, ante la insistencia del SPD, no se cerrarán los campamentos donde los migrantes deben esperar mientras se toma una decisión.