En base a las informaciones publicadas por portales de información opositores, los batallones han recibido los nombres de Al Jansaa y Umm al Rayan. El ISIS habría establecido condiciones a las mujeres que pueden unirse a ellos: han de ser solteras y tener entre 18 y 25 años de edad.
Estos portales han indicado que cada una de las integrantes de los batallones recibirá un salario mensual de 25.000 liras sirias (alrededor de 130 euros), tal y como ha recogido la cadena de televisión emiratí Al Arabiya.
El líder opositor Ibrahim Moslem ha indicado que el ISIS ha sido consciente de que «activistas que se oponen al grupo se visten con »burkas» para pasar los puestos de control sin problema».
«Establecer los batallones femeninos era la única opción para poner fin a la situación. La organización –en referencia a los hombres del grupo– no pueden cachear a las mujeres, pero ahora que se han establecido los batallones es posible», ha remachado Moslem.
El ISIS, que surgió a raíz de la unión de la filial de Al Qaeda en Irak y varias organizaciones radicales asentadas en Siria en el marco del conflicto contra el Gobierno de Bashar al Assad, se ha hecho con el control de varias zonas del país, donde ha comenzado a imponer una visión estricta de la »sharia» (ley islámica).
El grupo ha reclamado la autoría de varios atentados, secuestros y ejecuciones tanto de miembros de las fuerzas de seguridad como de milicianos de otras brigadas de tendencia más moderada o laica. En los últimos meses ha protagonizado diversos enfrentamientos contra miembros del Ejército Libre Sirio (ELS) y milicianos kurdos en el noreste del país.