Un gran jurado federal ha devuelto este viernes la imputación de trece ciudadanos y tres entidades de ese país por incumplir la legislación penal de Estados Unidos para interferir en el proceso político y electoral norteamericano.
Un portavoz de la Fiscalía Especial que lleva este caso ha contado que el escrito de imputación acusa a los trece rusos y a las entidades de conspirar para el fraude en Estados Unidos. Tres de los acusados también son sospechosos de conspiración para cometer fraude bancario y mediático y otros cinco están acusados de robo agravado de identidad.
El escrito de imputación sostiene que algunos de los acusados se hacían pasar por estadounidense y, sin revelar su relación con Rusia, se comunicaron personas relacionadas con la campaña de Donald Trump y con otros activistas políticos para «coordinar actividades políticas».