A partir del próximo 1 de julio todo vehículo a motor que circule por las carreteras francesas, a excepción de los ciclomotores con cilindrada inferior o igual a 50 cm3, deberá llevar un etilómetro homologado en función de la normativa de Francia.
El Decreto, aprobado el pasado 28 de febrero, es aplicable a todo conductor de vehículo a motor nacional o extranjero que circule por territorio francés, e incluso a los conductores de autobuses de pasajeros y escolares.
Los etilómetros contemplados son tanto químicos como electrónicos y, en el caso de los aparatos de un único uso, deberá respetarse la fecha de caducidad establecida por el fabricante. Podrán adquirirse en establecimientos de múltiples tipos, desde farmacias, grandes superficies, tiendas del sector del automóvil, gasolineras e, incluso, por Internet.
Todo conductor que carezca de un etilómetro homologado será sancionado con 11 euros, aunque este importe puede incrementarse hasta 33 euros en caso de impago.
Las autoridades francesas de tráfico han anunciado que la medida entrará en vigor el próximo 1 de julio, si bien las infracciones no se denunciarán hasta el 1 de noviembre.
Los etilómetros aceptados por la normativa francesa son los denominados »etilómetros de clase 1» y deberán estar homologados según la norma NF X20704.