Sanidad activa la alerta a nivel nacional tras detectar ocho casos sospechosos de la viruela del mono en la capital. El primer aviso llegó con la detección de varios casos en Reino Unido y luego en Portugal hasta llegar a España, donde ya se investigan varios pacientes con infecciones compatibles con este virus.
Por el momento, el Ministerio de Sanidad se ha dirigido a las Comunidades autónomas y ha solicitado que notifiquen si registran algún posible caso. Además, el Centro Nacional de Microbiología ya ha comenzado las pruebas genéticas para confirmar que se trata de esta enfermedad rara.
La alerta se ha activado después de que Reino Unido diera la voz de alarma al confirmar un brote con siete casos en su país y días más tarde Portugal confirmara que había llegado a la península con tres casos, dos pendientes de confirmación y quince en investigación. Por el momento todos los casos confirmados se han dado en hombres que mantienen relaciones sexuales con otros hombres. «de acuerdo a los procedimientos del Sistema de alerta precoz y respuesta rápida se ha abierto una alerta a nivel nacional, se ha comunicado a la Ponencia de Alertas la situación y se ha avisado a todos los actores clave para garantizar una respuesta rápida, oportuna y coordinada», ha comunicado el ministerio de Sanidad.
Entre los casos ya detectados no se ha localizado por el momento ningún vínculo, lo que podría llevar a pensar que hay activas varias cadenas de transmisión. El primer caso detectado había viajado a Nigeria y es conviviente con otro de los pacientes, sin embargo, el resto no guardan relación, por lo que las autoridades sanitarias de Reino Unido han adelantado que «la evidencia sugiere que podría haber transmisión comunitaria».
El contagio entre humanos de la viruela del mono no es usual y suele presentar fiebre, dolor muscular y fatiga. Pasados los días aparecen lesiones cutáneas que por lo general empiezan en la cara. La mayoría de los pacientes se recupera en semanas aunque los niños presentan más riesgos de revertir gravedad.