Ximo Puig, el presidente de la Comunidad Valenciana, ha anunciado que se implantará un toque de queda entre la medianoche y las 06.00 de la mañana hasta, al menos, el 9 de diciembre.
El presidente ha explicado que el gobierno Valenciano aboga por un criterio único para todo el territorio español, sin embargo, algunas comunidades se han mostrado contrarias durante el consejo territorial celebrado el jueves así que han decidido adelantarse.
«El virus siempre parece que nos vaya por delante y tenemos que atajarlo», ha dicho en rueda de prensa. La medida entrará en vigor a partir de que el alto tribunal valenciano le dé el visto bueno a las restricciones, y el presidente espera que se pronuncien a principios de la próxima semana.
El toque de queda pretende restringir las reuniones de familiares y amigos tanto en la vía pública como en el ámbito privado para detener los brotes que se han detectado en las últimas semanas.