La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha recordado, en el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, que España llega a este 25N muy cerca de poder aprobar la Ley de Libertad Sexual y con una propuesta de presupuestos generales con la partida más alta de la historia en la lucha contra la violencia machista.
Tras el minuto de silencio en homenaje a todas las víctimas de violencias machistas, ha tenido lugar en el Ministerio de Igualdad, el acto institucional online con motivo de la XVII entrega de los reconocimientos y menciones especiales del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres.
El acto, conducido por la delegada del Gobierno Contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, ha contado con la presencia de la ministra de Igualdad, Irene Montero y de la secretaria de Estado Contra la Violencia de Género, Noelia Vera.
«Esta entrega de reconocimientos es un acto de celebración de la vida, pero también de memoria y reparación por las que ya no están», ha afirmado Montero. «Es una llamada a la unidad, a los pactos de mujeres, a las alianzas feministas. El patriarcado nos quiere calladas, pero las mujeres sabemos que solo en común, codo con codo, podemos cambiar las cosas. Este es el Ministerio de todos las mujeres, de todas las feministas».
La ministra de Igualdad ha reafirmado el compromiso en la lucha contra la violencia machista por parte del Gobierno de España y especialmente del Ministerio de Igualdad. «La violencia contra las mujeres constituye una de las más graves vulneraciones de derechos fundamentales y la expresión más cruel de la discriminación y poder de los hombres sobre las mujeres».
Montero ha recordado que España llega a este 25N muy cerca de poder aprobar la Ley de Libertad Sexual y con una propuesta de presupuestos generales con la partida más alta de la historia en la lucha contra la violencia machista. «Llegamos con enormes proyectos aún por delante como la Ley Integral Contra la Trata, el Plan de Inserción Laboral y Social para mujeres en contextos de prostitución o la Estrategia Nacional contra las violencias machistas».
Para todo ello Montero ha hecho un llamamiento a renovar el pacto contra la violencia contra las mujeres. Un pacto institucional que refuerce las medidas de colaboración y cogobierno. A la vez, ha recordado, «es necesario renovar también el pacto social y político contra el machismo», especialmente «cuando una parte de las fuerzas políticas de nuestro país niegan la existencia de la violencia machista». España, ha dicho, «necesita un pacto feminista entre mujeres, mujeres distintas, que son las que nos ha traído hasta aquí».