Misiones Salesianas ha advertido de que los niños que están perdiendo a sus padres por culpa del ébola en Sierra Leona, Liberia, Nigeria y Guinea Conakry quedan en una situación muy complicada, puesto que algunos no pueden ni volver a sus casas por el miedo de las personas de su entorno a que puedan contagiar también ellos la enfermedad.
De hecho, Misiones Salesianas advierte de que a finales de este año sólo en Sierra Leona el número de menores huérfanos podría superar los 200, por lo que el Gobierno del país ha pedido a los salesianos que se hagan cargo de estos niños huérfanos.
Por otra parte, esta organización religiosa resalta también el miedo que los profesionales sanitarios tienen al contagio, lo que lleva a muchos a no acudir a su puesto de trabajo. Además, muchas personas enfermas no acuden al médico por miedo a que su estado de salud empeore, debido a que los hospitales son uno de los focos de infección.
La portavoz de Misiones Salesianas, Ana Muñoz, indicó que “la epidemia será controlada gracias a los esfuerzos de médicos y organismos internacionales, pero las consecuencias del ébola estarán presentes por mucho tiempo y necesitamos la colaboración de mucha gente para hacer frente al futuro”.