“Hay que ajustar los precios y las remuneraciones junto a un aumento de la productividad para salir de la crisis”. Con esta declaración ha sorprendido el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, pretendiendo dar la clave para la mejora de la situación económica de España.
El gobernador ha presentado esta idea como su receta para salir de la crisis porque, según ha señalado, esta es la única alternativa que tiene el Gobierno para resolver la actual encrucijada. En este sentido, explicó que, al no poder emplear una política de devaluación de la moneda, cambiaría la “devaluación interna”, que pasa por “el ajuste de precios y remuneraciones”, junto con “aumentos de productividad fruto de una mejor gestión del trabajo”. Son la “única alternativa disponible a muy corto plazo para impulsar y recuperar la competitividad perdida”, sentenciaba.
Ante estas declaraciones, el Profesor de Economía de la UNED, Alejandro Conde, ha manifestado que debe tratarse este asunto con seriedad: “Hay que tomar medidas serias y no amenazar al rico y cargar de impuestos al pobre”. Sobre el posible control de los precios, Alejando apunta que “se puede hacer, pero terminaremos como Cuba. La economía se tiene que dejar hacer, los precios suben porque también suben los costes”.
Este experto señala que es muy importante que moralicemos la economía, hay que reducir los gastos innecesarios, como hacen las familias. Además explica que vender más barato es muy difícil porque hay muy poca flexibilidad: “¿Cómo se va a hacer si todos los costes han subido? Hay que tomar medidas más serias”.
Sobre establecer un tope salarial, Conde destaca que “todo es posible, como se ha hecho imponiendo un tope al sueldo de los directivos de bancos. Es un truco, una tontería. El empresario quiere un trabajador que trabaje y esté contento. Las medidas de control son inútiles. Lo que hay que hacer es exigirles a los bancos que cumplan con la ley. No es tan fácil de hacer, sobre todo si se suben los costes, porque así lo que están haciendo es desmoralizar al pueblo”.