Pasan los años y los futbolistas se van retirando, pero en la mayoría de casos, su legado está salvo, pues sobrevive a través de sus hijos. Esos niños que han crecido viendo a papá jugar al futbol han tenido como primer regalo de cumpleaños un balón y como segundo, unas botas de tacos.
En psicología se dice que el primer referente para un niño es su padre y aunque de pequeños, casi todos los niños quieren ser futbolistas o astronautas, los que son vástagos de los más grandes no renuncian a su sueño. No todos llegan, pero todos lo intentan.
A lo largo de los últimos años hemos visto crecer a los hijos de grandes futbolistas de los 90 y uno de los últimos en explotar es Fernando Redondo junior, hijo del exfutbolista del real Madrid entre otros, Fernando Redondo.
El chico tiene 19 años y ha salido a su padre. Es zurdo, como él, y en sus regates se ven las mismas hechuras que hicieron de su padre uno de los mejores mediocentros del mundo. Corre igual, abre los brazos para cubrir la pelota igual y tiene mucho tiempo aún para pulir su técnica.
En su forma de jugar se parece más al Redondo de los primeros años y al que llegó al Tenerife que al que se consagró en el Real Madrid. Para los que no lo recuerden, ‘el Príncipe’, como se apodaba a Redondo padre en Argentina, era un mediapunta goleador al que le gustaba terminar las jugadas en el área y marcar goles. En el Real Madrid retrasó su posición y se convirtió en mediocentro defensivo. Pivote.
Ese ‘redescubrimiento’ de Redondo como ‘5’ argentino fue toda una bendición , pues en ese puesto el argentino sacó lo mejor de su repertorio y para al historia quedará el taconazo ante el Manchester United que dio a Raúl el tercer gol en Old Trafford
Subió con 17 años y no se ha movido del primer equipo
Fernando Junior juega en el Atlético Tigres de Argentina, en el que debutó con 17 años de la mano del actual entrenador de Boca Juniors, Rodolfo Marín Arruabarrena, ‘El Vasco’ viejo conocido por la afición española tras su paso por el Villarreal. «El Vasco me llamó y cuando me dijo que me tenía que presentar a entrenar, no lo podía creer. Es lo mejor que me pasó. Debutar en Primera es mi sueño desde chiquito, desde que se me ocurrió jugar al fútbol. Es lo que quiere todo pibe cuando patea su primera pelota»», declaró el Mini Redondo al periódico Olé en aquel entonces.
Desde ese día, Redondo no se ha movido del primer equipo y es uno de los referentes del equipo en el ataque. Este futbolista, que se declara «admirador de Juan Román Riquelme y Kaká», comentó además que para él sería «un sueño» poder jugar al lado del mediapunta argentino, que ha confirmado su voluntad de marchar de Boca y tiene en Tigre a una de sus posibilidades para elegir nuevo equipo. «Sería increíble. Lo vi toda mi infancia como un ídolo y poder llegar a compartir un plantel con él sería algo impensado», admitió Fernando Redondo.
Sobre lo que le dijo su padre. Redondo no es uno de esos padres que quiere ‘realizarse’ a través de su hijo. Fernando se realizó como futbolista en todos los sentidos. «Me pidió que disfrute y que tenga confianza cuando me toque entrar a una cancha», contó como consejo del ex volante central, surgido de Argentinos Juniors. “Mi viejo fue un jugador de otro mundo. Además, jugamos en distintos puestos porque yo soy enganche», finalizó Fernando, pero su padre también empezó de enganche ¿Quién sabe lo que le puede esperar en un futuro?