Las bolsas del contorno ocular son una de las principales preocupaciones estéticas más comunes tanto en hombres como en mujeres: de hecho, su eliminación (conocida como blefaroplastia) es la intervención estética más demandada por el sexo masculino, ya que es una operación sencilla que mejora su aspecto y con la que consiguen quitarse años de encima. Durante el último año, según datos del Institut Vila-Rovira, la demanda de este tratamiento ha aumentado un 300%.
La blefaroplastia transconjuntival es una intervención destinada a eliminar las bolsas grasas del párpado inferior, que consiste en una incisión transconjuntival a través de la cual se extraen las bolsas de grasa, sin puntos (por lo tanto, sin cicatrices), y que se realiza de forma ambulatoria, sin necesidad de ingreso, con anestesia local y sedación. La intervención dura aproximadamente una hora, y los resultados definitivos se aprecian por completo pasados unos tres meses.
Tras la intervención, el primer día pueden sentirse algunas molestias o escozor, que disminuyen pasados dos o tres días, y el paciente puede incorporarse a su rutina habitual en aproximadamente una semana. Durante los cinco días posteriores a la cirugía se recomienda evitar las actividades bruscas que puedan producir una subida de la presión arterial, como por ejemplo la práctica de deportes.
Está indicada para personas a partir de los treinta y cinco años, momento en que en el rostro comienza a hacerse evidente el paso del tiempo.