«La familia Carabante, con José Ramón Carabante como propietario, y Luis Carabante como presidente, han conducido el rumbo del club a lo largo de las últimas cuatro campañas, cumpliendo el compromiso adquirido con las Instituciones y la sociedad murciana, y tras recogerlo en una situación delicada han dado estabilidad al proyecto deportivo, gozando hoy día de un reconocido prestigio dentro del mundo del baloncesto profesional», recuerda el club.
Por ello, la Universidad Católica de Murcia estudia liderar este proyecto en la máxima competición nacional del baloncesto profesional. «En un contexto económico tan complicado, la UCAM quiere garantizar la continuidad de uno de los clubes emblemáticos de la ciudad y de la Región de Murcia», añade el comunicado.