La revista Green UpTown publicó el pasado mes de marzo, las ciudades más verdes y ecológicas de 2013. El primer puesto lo ha conseguido Vancouver (Canadá). Esta ciudad ha puesto en marcha un Plan de Acción cuyo objetivo es ser ‘La ciudad más verde’, esperando ver resultados en 2020. Desde hace ya tiempo, trabajan en propuestas innovadoras como la construcción de nuevos edificios neutros al carbono o la transformación de su sistema de transporte: sustituyendo los vehículos contaminantes por bicicletas. Con ideas tan interesantes como éstas, Vancouver, deja claro que vamos a oír hablar mucho de ella.
Listado de las diez ciudades más verdes
Vancouver (Canadá) inaugura el listado por ser la ciudad más ecológica del Plan de Acción 2020. Como parte de sus objetivos de ser la ciudad más verde del mundo, el consejo local trabaja con los residentes en la promulgación de cambios radicales en la gestión de los residuos, los ecosistemas y el carbono.
Se trata de un ambicioso proyecto para lograr nuevos edificios de carbono neutral para el año 2020. Vancouver también tiene como objetivo transformar totalmente su sistema de transporte con el desarrollo de una nueva e innovadora Ciclovía y los 28 km de longitud de los proyectos Seaside Greenway.
Ciudad del Cabo (Sudáfrica) se ha ganado estar segunda en el listado de las 10 más verdes por su eficaz programa de eficiencia energética. El objetivo de este plan es la reducción del consumo dentro de la municipalidad, por lo que implementa normas estrictas sobre la reducción de energía, al tiempo que mejora el tráfico y el alumbrado público.
Hace años, esta ciudad fue reconocida por sus esfuerzos ecológicos y por ser lo suficientemente buena como para ser incluida en la lista de los 10 ciudades más verdes. En 2010, a causa de los continuos esfuerzos realizados, se ha convertido en un centro internacional de la sostenibilidad.
Ciudad del Cabo es posiblemente una de las ciudades más pobladas del mundo, pero ha demostrado continuamente a través de los años que el número de sus residentes no es un obstáculo para seguir cumpliendo su objetivo de ser totalmente verde y sostenible.
Abu Dabhi (Emiratos Árabes Unidos) se las ha arreglado para ocupar la tercera posición del podio mundial debido a los esfuerzos llevados a cabo para promover la reducción de residuos, la conservación del agua y la eficiencia energética. Implementa el Estidama Perl Rating System, que promueve la implementación de medidas basadas en la filosofíaGoing Green.
Uno de los proyectos verdes más fascinantes de esta ciudad es el desarrollo de Masdar, la Ciudad Verde, que también se conoce como una de las comunidades más sostenibles del mundo. Masdar es una ciudad modelo que ofrece lo mejor de la industria financiera, con su ambiente emprendedor y creativo. Se trata de un estupendo lugar para comenzar un negocio, ya que es una comunidad diseñada específicamente para tener la menor huella positiva de carbono.
Adelaide (Australia). Además de una de las más bellas ciudades de Australia, Adelaide también es una de las que más está en sintonía con las normas de vida verde. Tiene 29 parques y hoteles verdes y, además, es conocida como la Ciudad del Ciclismo, ya que ofrece más de 500 bicicletas que se pueden utilizar de forma gratuita.
En materia de transporte público, Adelaide cuenta con Tindo, el primer autobús impulsado por energía solar del mundo, que dispone de aire acondicionado e internet inalámbrico.
El reciclaje es también una parte de sus bazas fuertes. El mercado central de la ciudad recicla más del 85 % de sus residuos; y el uso de recursos renovables como la energía solar se ha convertido en una parte importante de la vida sostenible en Adelaida. Como prueba de ello, la mayoría de los edificios como la Casa del Parlamento, la Galería de Arte de Australia del Sur, la estación central de autobuses de Adelaida y el Museo y Galería de Arte del Sur de Australia se jactan de tener sistemas de paneles solares instalados para su sostenimiento energético.
Dallas (Texas, Estados Unidos). La capital del estado norteamericano de Texas es la que se coloca en mitad de la tabla. Ha sido uno de los primeros lugares del planeta en hacer obligatoria la implementación de las normas de construcción verde. Desde octubre del año pasado, se exige que todos los proyectos de edificios comerciales y residenciales satisfagan el Código de Construcción Verde, por el que se otorga la certificación LEED.
Como consecuencia de seguir a rajatabla los estrictos códigos de instalación de cañerías, se espera reducir el consumo de agua hasta en un 20%.
Dallas también incorpora la sostenibilidad mediante la reducción y reutilización de los recursos, la conservación del agua y la eficiencia energética, esfuerzos que se traducen efectivamente en una economía más fuerte y mejor.
Copenhague es la ciudad más famosa de Dinamarca debido a sus hermosos paisajes y sus magníficos castillos; pero últimamente también lleva a gala su ubicación entre las ciudades más verdes del mundo debido a su compromiso con altos estándares ambientales intrínsecos a su estilo de vida.
En la actualidad, ostenta el título como Capital Verde Europea, gracias a los esfuerzos de sus ciudadanos y el Gobierno por lograr mantener un entorno con unos niveles de higiene y limpieza elevadísimos.
A lo largo de los años, y con los continuos esfuerzos para convertirse en una ciudad sostenible y para permanecer en esa categoría, la capital danesa se ha construido con éxito una gran reputación como líder mundial en la lucha contra el cambio climático. Es una ciudad conocida por sus bicicletas: solo un tercio de sus residentes utilizan motos principalmente para llegar al trabajo y sus centros de estudio y para moverse por la ciudad. Para el próximo año, se espera que el número de usuarios de bicicletas alcance el 50% del total de residentes locales.
Portland (Oregón, Estados Unidos) tiene el honor de situarse en la séptima plaza de este ranquin por los grandes esfuerzos realizados por la ciudadanía por reciclar, compartir vehículo cuando viajan, acreditar sus edificios con la certificación sostenible LEED y fomentar comer localmente.
Portland es la ciudad más grande de Oregón y también destaca por haber realizado un empleo eficaz de los recursos de energía renovables: actualmente, esta ciudad consume un 20 % más de electricidad generada con fuentes limpias que el resto del país. De hecho, Portland consume el 33 %, mientras que el promedio nacional es del 13 %.
Además, también fue una de las pioneras en prohibir el uso de bolsas de plástico; cuenta con alrededor de 250 kilómetros de carril-bici, caminos y senderos.
Ofrece aire fresco y limpio, y el agua suministrada a sus residentes es considerada como la más limpia de entre las mayores ciudades de Estados Unidos. En cuanto al reciclaje de residuos, ahorra 250 000 toneladas de CO2 cada año.
Oslo (Noruega). A pesar de ser una de las ciudades más pobladas de Noruega, Oslo también lleva a gala ser la más “verde” de todas. Esto significa que, a pesar del creciente número de personas que viven en allí, ha sido capaz de mantener su objetivo de conservar su espíritu “verde” y utilizar métodos sostenibles.
En 2007, Oslo fue elegida la segunda ciudad más verde del mundo y también una de los más habitables. Actualmente, se mantiene entre las 10 más verdes, mérito que comparte con el de ser una de las ciudades más caras del planeta.
Mientras que otras ciudades europeas y destinos como Reykjavik en Islandia y Malmo en Suecia también han adoptado verdaderas prácticas verdes para mejorar su calidad de vida, Oslo hizo los deberes mucho antes, por la gran preocupación que existe en la población desde hace muchos años sobre la importancia de la conservación del medio ambiente.
Un ejemplo de los pasos dados por Oslo en este sentido es que en 2012 se reemplazó el combustible para calefacción con recursos energéticos renovables y todos los autobuses que funcionaban con combustibles fósiles ahora utilizan biocombustibles. En cuanto a emisiones de carbono, la capital noruega tiene los índices más bajos de entre todas las metrópolis europeas.
Una de las principales razones por las que Oslo ha tenido mucho éxito a la hora de alinearse con la cultura del verde es la gran cooperación mostrada por su población, así como los incentivos ofrecidos por el Gobierno para que cada edificio se desarrollara y construyera promoviendo la eficiencia energética.
También es digno de mencionar que el 85 % de los niños en edad escolar van en bicicleta, a pie o utilizan el transporte público accionado con energía hidroeléctrica. Además, el 94 % de los residuos domésticos se recicla adecuadamente.
Al caminar por los alrededores de Oslo, se respira un aire de gran calidad y se puede observar una vista excepcional: calles libres de basura.
Friburgo (Alemania) se encuentra en la novena posición por tratarse de un sitio altamente sostenible porque sus carreteras están libres de coches. Por sorprendente que parezca, esta ciudad ha sabido mantener su estilo de vida medieval. La ciudad está rodeada de verdes colinas que forman una valla. Se trata de una ciudad muy popular por sus paisajes impresionantes y su gran nivel de vida, aparte de su clima cálido y soleado a lo largo de todo el año.
Durante décadas, Friburgo ha practicado la vida “verde”. Tras la destrucción sufrida como consecuencia de la Segunda Guerra Mundial, la ciudad fue reconstruida mediante principios ecológicos sostenibles. Y, en la década de los 80 del siglo XX, fue cuando se transformó en una ciudad libre de automóviles.
Zermatt (Suiza). Este sitio encantador y pintoresco ocupa el número 10 de la lista. Se encuentra enclavado a los pies de la montaña de Matterhorn, y es un lugar ideal para practicar el senderismo, el montañismo y el esquí. A pesar del aumento en la industria del turismo suizo, esta ciudad ha sabido defenderse la necesidad de desarrollar infraestructuras modernas y de la creciente demanda de tráfico. Hasta hoy, las calles de Zermatt se llenan solo de peatones, gente en sus bicicletas, carros tirados por caballos, carros de mano y un par de coches eléctricos (vehículos de emergencia).