Este domingo se cumplían dos meses de la desaparición de la joven de 15 años Malén Ortiz, que fue vista por última vez en una parada de autobús en Son Ferrer (Calvià, Mallorca), y sigue sin haber rastro ni nuevos datos que determinen qué ha ocurrido con ella. La adolescente desapareció en el trayecto entre el instituto y la casa de su novio, adonde iba a comer.
Pero nunca llegó a su destino. La joven avisó a su padre de sus movimientos, llamando a la secretaria y dejando el recado. Desde es fatídico día, el 2 de diciembre, no se sabe nada de Malen. Tampoco han aparecido la mochila y el patinete que llevaba consigo. Es como si se la hubiera tragado la tierra.
¿Huida voluntaria o secuestro?
Las dudas en torno a cómo desapareció la adolescente aparecieron desde el primer momento. La Guardia Civil confiaba poco en el secuestro y daba más validez a la teoría de la huida voluntaria. Supusieron que la joven estaba harta, dio carpetazo y se fue.
Pero pasaron los días y se seguía sin tener señales de vida de Malen. Un «cambio de evidencia», según comentó en su momento la delegada del Gobierno de Baleares, Teresa Palmer, hizo cambiar de opinión a los investigadores y se comenzó a barajar la línea del secuestro.
Han pasado 64 días y la adolescente no aparece. El pasado 4 de enero se supendieron los operativos de búsqueda por el terreno, aunque continuaron por otras vías, como el registro de una casa abandonada en la zona de sa Porrasa, en el municipio de calvià, o el de la casa de novio de Malen, supuesto destino de la joven aquel día.
La Guardia Civil todavía no ha descartado ninguna de las dos hipótesis, pero el padre de Malen lo tiene claro: Secuestro. Alejandro Ortiz no cree que su hija se fuera de casa sin más, sin dinero y sin nada. asegura que no había motivo para ello «porque la niña tenía de todo, no la faltaba nada».
Hasta 80 personas, entre Guardia Civil, Policía, Protección Civil y voluntarios han participado en los operativos de búsqueda por tierra, mar y aire en la zona en la que desapareció, sin éxito, todos con el mismo objetivo: encontrar a la joven de 15 años perdida desde hace más de dos meses.
La familia y amigos también han hecho llamamientos públicos para encontrar a Malén, cuya foto en carteles está en prácticamente todas las calles de Mallorca, apenas queda un rincón en el que la cara de Malen sera sobradamente reconocida.
Alejandro ha organizado concentraciones y ha aparecido en diversos programas de televisión narrando la historia de la desaparición de Malén, mientras su madre, Natalia Rodríguez, ha evitado aparecer en los medios, pero ha insistido desesperadamente en que no se deje de buscar a su hija.
«Pido la colaboración ciudadana, no quiero que Malén se transforme en una foto más colgada en la pared y que la indiferencia y el olvido se apoderen de ella», decía Natalia en un comunicado remitido a los medios el pasado 14 de enero. La desaparición de la joven sigue presente aún en las noticias y en la ciudadanía balear, que espera que en cualquier momento se sepa qué ha ocurrido con Malén.
El padre la busca por su cuenta
Alejandro Ortiz está deseperado por la paralización de las búsquedas, y harto de esperar ha empezado a buscar de nuevo este lunes a su hija. Y no lo ha hecho solo. El padre de Malén ha conseguido que equipos de Protección Civil se sumen a las tareas de rastreo, que arrancarán cada día a las 10.00 de la mañana, y se prolongarán hasta las dos de la tarde.
La primera batida se ha llevado a cabo en el Jungle Park de Santa Ponsa. Alejandro Ortiz anima a todos los ciudadanos a que se sumen a la búsqueda, que recorrerá lugares ya investigados por la Guardia Civil, y otros aún no peinados. Además de buscar a Malen, se buscan pistas que den con el paradero de la niña como la mochila, el patinete o el móvil.
El Coronel Jefe de la Benemérita en Baleares, Jaume Barceló, ha asegurado esta semana que el Cuerpo Armado arrancará en breve una nueva búsqueda de la menor, por lugares próximos a los que ya se han rastreado, y cercanos por tanto al área de Sa Porrassa, donde se vio a la chica de quince años por última vez.
Malén llevaba una chaqueta vaquera azul, una camisa a cuadros y pantalones rasgados
En la casa familiar conviven el padre de la niña, Alejandro Ortiz, la propia Malén y su hermano Bruno, de 12 años de edad. El hombre se separó de su esposa hace ya algunos años. La exmujer de Alejandro se encontraba de viaje en Tailandia cuando se produjo la desaparición, pero regresó de inmediato tras enterarse de lo sucedido.
La menor ha sido buscada en las zonas de Santa Ponça, El Toro, Son Ferrer, Cala Vinyes y Cala Figuera, y en un antiguo parque acuático de Magaluf. En el momento de su desaparición, Malén portaba una chaqueta vaquera azul, una camisa a cuadros, pantalones rasgados, zapatillas rosas, una mochila con libros y un monopatín verde.