Las »fiestas de sarampión» son peligrosas. Es la advertencia que ha tenido que realizar el Estado de California ante la proliferación de estas celebraciones, una nueva moda entre los padres del estado para contagiar a sus hijos de la enfermedad. El sarampión es una enfermedad infecciosa bastante frecuente, especialmente en niños, y una vez contraída, el cuerpo adquiere inmunidad permanente. Así, se han comenzado a organizar fiestas para su contagio, pero las autoridades sanitarias californianas advierten que son peligrosas.
«El sarampión es una enfermedad seria, que puede tener significativas consecuencias», aseguró el epidemiólogo estatal Gil Chavez en un comunicado. Estados Unidos ha registrado en las últimas semanas un pico de la enfermedad, con más de 130 casos sólo en este estado, algo que ha provocado la preocupación entre ciertos sectores de la población. Se cree que el brote actual surgió en Disneyland.
Más de un 30% de los casos de este brote han tenido que ser hospitalizados, aseguró Chavez. Además, este tipo de eventos extendería aún más este brote de la enfermedad, poniendo en peligro a más gente.
Aunque las autoridades no han recibido información sobre celebraciones de este tipo, aseguran haber recibido peticiones de información sobre los beneficios de »inmunización natural», algo «poco aconsejable y peligroso». Las autoridades también niegan que dicha »inmunización natural» sea más eficaz que la vacuna ya existente y muy extendida contra la enfermedad. «A cualquier padre que esté considerando esto, deberían ver a un niño que está realmente enfermo de sarampión, y creo que cambiarían de opinión».
Se cree que esta tendencia, producida por el escepticismo ante las vacunas de algunos, pocos, padres, está inspirada por las »fiestas de la varicela» de los 80, cuando se organizaban para la infección de la enfemedad, compartiendo saliva, caramelos chupados y otros objetos de niños infectados.
La enfermedad del sarampión puede provocar hinchamiento del cerebro, neumonía, efectos neurológicos a largo plazo e incluso la muerte, han advertido fuentes sanitarias.