El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García Margallo, apoyó este miércoles la propuesta israelí de suministrar casas prefabricadas a Gaza, cuyas viviendas quedaron destruidas o semidestruidas durante la ‘Operación Margen Protector’ que enfrentó a Israel y Hamás y que afectaron a 100.000 personas.
El ministro subrayó en una rueda de prensa posterior a una serie de reuniones que mantuvo hoy con varias autoridades israelíes que esta idea del presidente israelí, Reuven Ravlin, “puede resolver el problema de que materiales de construcción se utilicen para desarrollar explosivos. Entiendo las necesidades de la población gazatí y entiendo la preocupación de Israel de que los materiales de construcción pueden ser utilizados para fabricar explosivos”.
La franja de Gaza, en la que viven 1,7 millones de personas, vivió entre los días 8 de julio y 26 de agosto de 2014 la denominada ‘Operación Margen Protector’, en la que el Ejército israelí atacó las posiciones de Hamas en la zona.
El conflicto se saldó con la muerte de 2.143 palestinos y 11.500 heridos del mismo bando, según los datos del Ministerio de Salud de Gaza, mientras que 66 soldados y cinco civiles israelíes fallecieron y 1.306 resultaron heridos.
En ese sentido, y en relación con el bloqueo que tiene lugar en Gaza desde el año 2007, Margallo recordó que se debe combinar las necesidades de la población gazatí y la ambición israelí de tener garantizada su propia seguridad.
Del mismo modo, el ministro manifestó que “es perturbador para el proceso de paz que Hamás controle la franja, lo que dificulta las relaciones políticas y la reconstrucción de Gaza”. Por ello, apostó porque el proceso de paz, en la línea de lo sucedido en los Acuerdos de Madrid de 1991 desemboque en una solución que garantice “un Israel seguro y una Palestina viable que puedan convivir en paz”.
INICIATIVA MÁS INTELIGENTE
En cuanto a la decisión israelí de congelar la entrega de 100 millones de euros a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) en represalia por su solicitud de adhesión al Tribunal Penal Internacional (TPI), Margallo consideró que “eso pondría en peligro las transferencias procedentes de EEUU, por lo que deben acabar los acontecimientos de un lado y de otro, que sólo sirven para separarse más”.
Durante sus encuentros con las autoridades israelíes, Margallo se ha visto, además de con los líderes de la oposición Tzipi Livni e Itzjak Herzog, con el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, quien ha trasladado al jefe de la diplomacia española que la decisión del Congreso de los Diputados de instar al Gobierno al reconocimiento de Palestina es “la iniciativa más inteligente de todas aquellas que se han aprobado en Europa porque hacía una referencia explícita a la seguridad de Israel. Ha causado bienestar”.
Margallo reconoció que “no es ningún secreto” que a Israel no le ha gustado la resolución de la ONU que ponía un plazo máximo de tres años para que Israel se retirara de los territorios palestinos, y “mucho menos que Francia y Luxemburgo hayan votado a favor” de dicha resolución.
Por último, el ministro instó a ambas partes a buscar una “solución de consenso” en la ONU que permita salvar el veto de EEUU para “desencallar un conflicto que sigue estancado”.