Serrano Izko ha criticado tanto la forma como el fondo de esta reforma que ha calificado de «verdadera chapuza» a la vez que ha criticado el «carácter autoritario y prepotente de un Partido Popular que ha puesto todos los mecanismos del Estado al servicio de sus intereses electorales y partidistas».
El parlamentario navarro sostiene que la reforma del PP «vulnera derechos constitucionales, no respeta los procedimientos establecidos y supone un ataque frontal a la convivencia y a una posible salida dialogada al reto planteado en Cataluña».