El polémico seminario ‘España contra Catalunya’ aborda un tema recurrente en el discurso de la Generalitat; el agravio fiscal. Los organizadores de las jornadas han dedicado un capítulo a la “represión económica y social” en Catalunya que atribuyen al reparto injusto de los ingresos y cargas fiscales, entre otros motivos.
Núria Bosch, catedrática de Economía Aplicada de la Universidad de Barcelona y ponente en el simposio, sostiene que el déficit fiscal en Catalunya es del 8,5% debido sobre todo al modelo de financiación autonómica, y también a la falta de gasto en infraestructuras y en materia social.
La profesora, autora de un estudio sobre la viabilidad económica de una Catalunya independiente, explica que el saldo fiscal debe ser por lo general negativo porque es una comunidad rica: su PIB per cápita era de 27.248 euros en 2012, mientras que la media nacional se situaba 21.180 euros. Pero sostiene que el déficit es “excesivo”, si se compara con otras regiones del mundo con características económicas y demográficas similares a Catalunya, como Flandes, con un déficit del 4%, y Massachusetts (2,5%).
“El modelo de financiación afecta al déficit en un 35%. La redistribución está mal hecha y castiga a Catalunya y a otras autonomías, como Valencia y Baleares”, afirma Bosch, que añade que la falta de presupuesto en obras e infraestructuras incide en un 10%, y el “insuficiente gasto social” en un 11%.
La investigadora considera que con un reparto justo el déficit en Catalunya debería ser la mitad. “Hay lagunas en el sistema de financiación y ahora con la crisis, se recauda menos dinero. La redistribución es excesiva y castiga a los territorios ricos”.
La evolución del déficit fiscal ha sido creciente por el incremento del poder adquisitivo y la riqueza, según los datos de la administración catalana. Si en 1986 tenía un coste por habitante de 1.092 euros, ahora alcanza los 2.200 euros.
Una Catalunya independiente se parecería a Francia y el Reino Unido (en riqueza)
Núria Bosch ha elaborado un estudio sobre la viabilidad económica de una Catalunya independiente. Sostiene que la hacienda propia generaría un flujo de capital suficiente para asumir las competencias del Estado y gestionar el sistema de pensiones y la seguridad social.
A Catalunya le corresponde este año de transferencias del Estado, del fondo de suficiencia, 638,12 millones de euros. En capítulo de inversiones, en los presupuestos de 2014 se le reservan 944,4 millones de euros (el 9,6%) del total; Andalucía recibirá 1.697 millones, la región con más inversión en términos absolutos en estos presupuestos.
Núria Bosch compara una Catalunya independiente con países europeos y llega a varias conclusiones. El estado catalán sería relativamente rico y se parecía en PIB per cápita a Francia (28.921) y el Reino Unido (28.000) y por su tamaño demográfico, alrededor de 7,5 millones de habitantes, sería más grande que Dinamarca (5.534.738) y que Finlandia (5.351. 427), y algo menos que Austria (8.375.290).