El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha instado este miércoles al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, a que «ponga día y hora» a un encuentro entre ambos para abordar la cuestión catalana, y le ha retado a que proponga una reforma de la Constitución.
Mas ha hechos estas declaraciones en la sesión de control del Parlament, después de que ayer el Congreso rechazase por una muy amplia mayoría traspasar las competencias para que el Govern de CiU pudiese convocar una consulta soberanista el próximo 9 de noviembre, objetivo que la Generalitat mantiene y para lo que prepara una ley de consultas que sirva de paraguas legal.
La respuesta a Rajoy la ha dado en la sesión de control del Parlamento catalán después de la que la líder del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, le pidiese que coja el teléfono y «llame» a Rajoy para desencallar el enfrentamiento por el proceso catalán, no sin dejarle claro que, tras el rechazo de ayer de la cámara baja, «si busca otro camino para convocar la consulta, estará fuera de la democracia».
Rajoy insiste en un diálogo dentro de la Constitución
Poco más tarde, Rajoy ha comentado en el pleno del Congreso: «Hablaré con quien tenga que hablar y de lo que tenga que hablar, y voy a defender un proyecto de vida en común que data de hace muchos siglos y al que yo le auguro un excelente futuro para todos».
Si Rajoy se mantiene firme en que ningún español se vaya de la UE «por una decisión equivocada», el presidente de la Generalitat se ha esforzado en visualizar que el rumbo de su hoja soberanista se mantiene inalterada, para lo que buscará «otras vías» para «amparar» la consulta que le niega cerca del 90 % del Congreso, ya sean marco legales propios -la futura ley catalana de consultas- o bien «marcos legales internacionales.
El portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, ha confiado también en que se produzcan de manera inmediata contactos discretos a tres bandas entre el Gobierno, la Generalitat y el PSOE para explorar posibles vías de solución al problema catalán.
Por su parte, Mas ha retado a Rajoy a que formule una propuesta de reforma constitucional. Al respecto, el portavoz del PP en el Congreso, Alfonso Alonso, ha dicho que «la Constitución no puede ser reformada solamente para satisfacer a un nacionalismo enfadado».
La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha sido más directa y ha dicho que si Mas quiere una reforma de la Constitución debe ser él quien la proponga porque ni el jefe del Ejecutivo ni el PP han planteado esa posibilidad.
Para el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, el presidente de la Generalitat «tiene poca autoridad moral para hablar de mano tendida» y ha calificado de «punto de inflexión» el debate de ayer en el Congreso.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, se ha mostrado «absolutamente convencido» de que Mas no se saldrá «ni un milímetro» de la legalidad.
En la sesión de control del Parlament, el primer secretario del PSC, Pere Navarro, ha conminado al Gobierno y a la Generalitat a «abandonar las trincheras» y, «por responsabilidad», encontrar un «punto de encuentro» que permita salir del debate sobre la consulta con una solución «sin vencedores ni vencidos».
Navarro ha puesto de ejemplo el «esfuerzo» de los socialistas para llegar a consensos, y ha deslizado: «Ayer quedó muy claro que lo tendremos que sacar (a Mariano Rajoy) de la Moncloa para llegar a un acuerdo entre Cataluña y el resto de España».
En el PSOE, la vicesecretaria general de los socialistas, Elena Valenciano, ha asegurado que su partido «animará» a Rajoy a que abra «un espacio de diálogo amplio» para reformar la Constitución con el fin de mejorar el «encaje» de Cataluña.
ERC le recuerda a Mas que la prioridad es la consulta
El líder de ERC, Oriol Junqueras, ha pedido a Mas, por contra, que una vez transcurrido el debate del Congreso «la prioridad» siga siendo la convocatoria de la consulta de autodeterminación, y le ha instado a «mantenerse fiel» a los deseos de los catalanes.
Por su parte, el líder de ICV, Joan Herrera, se ha mostrado confiado en que el Estado va a tener que responder «tarde o temprano» ante la demanda «democrática» de Cataluña y ha rechazado cualquier alternativa, como unas plebiscitarias, a la celebración de una consulta soberanista: «Consulta sí o sí, sin atajos».
El líder de Ciutadans, Albert Rivera, ha reprochado al presidente catalán que «siga amenazando con dar golpes contra la Constitución», en alusión a su voluntad de mantener el rumbo de convocar una consulta soberanista.
La Generalitat se agarra a la ley de consultas para votar el 9 de noviembre
Los nacionalistas catalanes mantienen su rumbo hacia el referéndum de autodeterminación buscando otros «marcos legales», después del rechazo masivo del martes del Congreso español al proyecto.
El voto del Congreso de los Diputados «no es un punto y final, esto es un punto y aparte», contestó inmediatamente desde Barcelona el presidente nacionalista de Cataluña, Artur Mas. El presidente explorará ahora la ley de consultas que ultima la Cámara catalana o incluso «marcos legales internacionales».
El discurso del líder de CIU es que buscan vías legales alternativas para poder celebrar la consulta. El presidente catalán advierte de que estudiarán los marcos legales internacionales» para saber «cuántos de ellos nos pueden amparar» la convocatoria de un referendo consultivo sobre el futuro de Catalunya.