Los inspectores que investigan el accidente del ferry surcoreano ‘Sewol’, que se hundió el pasado miércoles y que hasta ahora ha dejado más de un centenar de muertos han confirmado que el peso del cargamento declarado en su último viaje era más de tres veces superior al máximo recomendado, según recoge el diario ‘The Wall Street Journal’.
El buque se hundió tras realizar un giro brusco, que provocó que la carga perdiera estabilidad. Mientras la Fiscalía sigue con la investigación, los altos cargos de Chonghaejin Marine, la operadora del ferry, tienen prohibida la salida del país. Además, se ha ordenado el registro de la residencia del propietario de la empresa, Yoo Byung-eun, así como la sede de la compañía del ‘Sewol’ y las de otras compañías de las que también es propietario.
Justo antes de salir del puerto de Incheon el martes de la semana pasada, un día antes del desastre, el ‘Sewol’ informó por comunicación radiofónica a la Asociación de Transportistas Marítimos de Corea de que llevaba un cargamento con un peso de 3.608 toneladas. Sin embargo, la recomendación para el mencionado ferry era de 987 toneladas.
La Fiscalía ha recogido documentación del Registro Coreano de Embarcaciones, el órgano de inspección gubernamental que dirigió las inspecciones de seguridad del ferry durante este año. La investigación se está enfocando a la comprobación de que el barco cumpliera con las regulaciones dispuestas.
Tras el rescate de 174 de los pasajeros, la operación de búsqueda continúa, mientras la última cifra de cadáveres recuperados del buque es de 159, según ha confirmado la agencia de noticias surcoreana Yonhap. Hasta el momento todavía siguen desaparecidas otras 143 personas.