La alianza conservadora entre la Unión Demócrata Cristiana (CDU) de la canciller Angela Merkel y sus socios de la Unión Social Cristiana bávara (CSU) se reeditará en las elecciones europeas de mayo, después de que hayan anunciado este lunes que han dejado de lado sus diferencias.
«El mensaje más importante que sale hoy es que no podíamos imaginar un momento tan armonioso como este hace cinco años», ha reconocido Markus Soeder, jefe de la CSU, tras una reunión de los líderes del partido en Berlín.
Esta tradicional alianza ha estado en riesgo los últimos años, especialmente desde que las políticas migratorias de Angela Merkel permitieron la llegada de un millón de refugiados a Alemania en 2015, la mayoría de ellos entraron en el país desde Austria hacia Baviera.
Soeder ha explicado que ha habido muchos cambios en Europa los últimos cinco años y ha sugerido que el nuevo liderazgo de Anne Kramp-Karrenbauer, que ha sucedido a Merkel al frente del partido, ha tenido mucho que ver en la decisión. Los acontecimientos en la CDU «han hecho posible un nuevo enfoque», ha afirmado.
Ambos partidos firmarán este lunes su acuerdo para concurrir juntos a las elecciones europeas del 26 de mayo, donde se presentarán como la opción segura contra los populismos de izquierda y derecha.
Las concesiones sobre temas importantes de seguridad doméstica y política de la UE han llevado al acuerdo, ha desgranado Soeder. El programa que llevarán a las elecciones europeas puede servir también «como un nuevo comienzo para el trabajo en común de la CDU y la CSU».