Nicolás Carvajal, colombiano de 31 años y residente en Reino Unido, decidió emprender la aventura de cruzar el océano Atlántico a remo y solo. Tras 82 días de viaje, el joven llegó en la tarde de ayer jueves al muelle de Georgetown, en Guyana donde fue escoltado por la Guardia Costera hasta suelo firme.
«Estoy feliz de estar finalmente en tierra» dijo a su llegada. «Casi no lo logro porque las corrientes en esta zona son muy fuertes», explicó a los periodistas.
Al llegar a Guyana, donde le esperaban sus padres y su novia, Carvajal saltó inmediatamente al muelle donde fue envuelto en una bandera colombiana y abrazado por sus familiares.
Decidió emprender esta aventura para recaudar fondos que ayuden a la investigación contra el cáncer, el joven dijo que logró recaudar unos 4.000 dólares para la organización Cancer Research UK y explicó que su principal motivación para emprender este viaje, además de mejorar la imagen de su natal Colombia, ha sido que su abuelo murió de cáncer y su hermano menor padeció y superó esta enfermedad.
«He visto ambos lados del espectro y por eso quería recaudar dinero y llamar la atención hacia la investigación del cáncer para intentar que más gente pueda sobrevivir», dijo.
Durante su viaje, Carvajal consumió comida precocida fría o que calentaba en una cocina de gas. «Temí quedarme sin comida porque el viaje se extendió más de lo previsto, por lo que tuve que racionarla y a veces pasaba unas horas con hambre, pero al final las cosas funcionaron bien», pudo explicar.
El heroico remero también ha relatado que volcó una vez durante el trayecto y estuvo separado de la nave unos 10 metros, pero fue capaz de volver a la embarcación y retomar su viaje de más de 3.000 millas (casi 5.000 km). Igualmente ha explicado que al final del recorrido tuvo que pedir asistencia a la Guardia Costera de Guyana para evitar que las corrientes le hicieran desviarse hacia costas despobladas de Venezuela.
«Mi prioridad es una buena y suave cama y una comida caliente», bromeó el colombiano.
Las autoridades turísticas de Guyana le tienen preparadas varias sorpresas a Carvajal antes de que regrese a casa, entre ellas un paseo a las cataratas Kaieteur.
Nicolás Carvajal, que se ha convertido en el tercer remero en atravesar el océano Atlántico y llegar a Guyana, partió el 26 de enero de las Islas Canarias y tenía previsto llegar a Barbados, pero cambió de planes al ser arrastrado por el viento hacia el sur.