Sanader ha recibido una sentencia más dura que la dictada previamente por un tribunal de primera instancia en 2017, que le condenó a cuatro años y medio de prisión por aceptar sobornos.
El juicio ha tenido lugar después de que el Tribunal Constitucional del país europeo fallara en 2015 que debían repetirse dos casos contra él por corrupción debido a errores de procedimiento.
En ese momento, el ex primer ministro, que había sido condenado a diez años de cárcel, había pasado ya cinco en prisión. Sanader huyó del país en 2010 para evitar ser arrestado, si bien fue detenido en Austria y entregado a Zagreb para hacer frente a los cargos contra él.
Sanader, que ocupó el cargo de primer ministro entre 2003 y 2009 fue expulsado de la Unión Democrática Croata (HDZ) seis meses después de que dejase el Gobierno.