La policía del Northern Territory de Australia ha recuperado los restos de Sean Cole, un joven de 26 años de edad, tras cazar al cocodrilo que lo mató mientras celebraba su cumpleaños de un amigo dándose un baño en un río interior de Australia el fin de semana.
Según recoge la prensa local, el equipo que ha logrado culminar la búsqueda explicó que la víctima, Sean Cole y un amigo, estuvieron nadando en una zona del Mary River infestada de cocodrilos, y cuando nadaban de regreso a la orilla un cocodrilo de 4,7 metros de largo atrapó a Sean Cole con sus mandíbulas a la altura del pecho, mientras un grupo de 15 amigos suyos observaban con horror la escena desde tierra.
El guardabosques de Northern Territory Tom Nichols dice que el cuerpo de Cole y el del cocodrilo muerto salieron a flote la madrugada del lunes. El cocodrilo había sido alcanzado por los disparos de los guardaparques pocas horas deespués del ataque de la noche del sábado, pero se había hundido antes de que pudiera ser recuperado el cuerpo del joven atacado.
«Este río tiene la mayor densidad de cocodrilos de agua salada en el mundo», dijo un portavoz de la Policía que expresó su extrañeza ante el lugar elegido para el baño por el grupo de amigos, que está repleto de señales advirtiendo de la presencia de cocodrilos y la prohibición del baño.
La Policía agradeció a los vecinos y al personal de la Mary River Wilderness Retreat, por su ayuda en la búsqueda. «Nuestros pensamientos están con la familia en este momento tan difícil», dijo el responsable de la búsqueda.