El Parlamento Europeo (PE) mantuvo hoy su confianza en el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ya que la moción de censura a la que se le sometió por el caso LuxLeaks ha sido rechazada por 461 votos en contra, 101 votos a favor y 88 abstenciones.
La moción fue promovida por los eurófobos y populistas representados por el grupo de la Libertad Europea para la Democracia Directa (EFDD) liderado por Nigel Farage (UKIP), y la mayoría de No Inscritos, por el caso LuxLeaks de presuntas ventajas fiscales a multinacionales.
La moción consiguió inicialmente el aval requerido de 76 formas y hoy sumaron otros 25 apoyos más, pero no fue suficiente para obtener los dos tercios requeridos por la Eurocámara para lograr la luz verde.
Los dos grandes grupos del hemiciclo, el Partido Popular Europeo (PPE) y los socialdemócratas (S&D) votaron en contra, igual que los Verdes y los liberales (ALDE).
La mayor parte de eurodiputados de la Izquierda Unitaria Europea (GUE/NGL) ha optado por la abstención, incluidos sus integrantes españoles de Podemos e IU.
Otros miembros de la GUEN/NGL han preferido no votar esta moción promovida por lo eurófobos que presentaba una disyuntiva complicada para el grupo que por su parte también había intentado promover una moción de censura contra Juncker, sin éxito por la falta de apoyos de Verdes y socialdemócratas.
Los acuerdos secretos fiscales entre Luxemburgo y casi 340 multinacionales, entre ellos Pepsi, IKEA, AIG, Coach o Deutsche Bank, fueron revelados a principios de noviembre por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ).
El caso LuxLeaks afectó a Juncker en su primera semana en el cargo, pero el líder del Ejecutivo se ha distanciado de la investigación del caso y ha traspasado su tutelaje a la comisaria de Competencia, la liberal danesa Margrethe Vestager.