La tiranía del Estado Islámico no tiene límites. Los yihadistas han vuelto a secuestrar y tirar al vacío a un hombre por ser gay. El macabro acto ocurrió en la ciudad siria de al Raqqa, conocido por ser el bastión de los islamistas. Allí, los terroristas lanzaron al hombre mientras una multitud asiste a la macabra acción como si se tratase de un espectáculo.
No es la primera vez que los bárbaros de Estado Islámico matan a un hombre por ser homosexual. Lo hicieron a finales de 2014 y durante los dos primeros meses del año lo han hecho en varias ocasiones.
Todavía más repugnante es que los terroristas rematan a pedradas al hombre moribundo que yace sobre el suelo. Otro ejemplo más de que la barbarie y las atrocidades de Estado Islámico no tienen límite.