Este mismo sábado un grupo de individuos han irrumpido en la Catedral de la Transfiguración del Señor de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana del Patriarcado de Moscú en la ciudad ucraniana de Vinnitsa, en el oeste del país, según ha informado la agencia de noticias rusa Sputnik. Entre 2014 y 2016 el Patriarcado de Moscú ha perdido 40 iglesias en territorio ucraniano.
En el Concilio de Kiev participan 42 jerarcas secundados cada uno por un sacerdote y un seglar, lo que supone un total de 126 delegados de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana, a los que hay que sumar doce obispos de la Iglesia Ortodoxa Autocefálica Ucraniana acompañados por un sacerdote y un seglar cada uno, es decir 36 delegados.
El Patriarcado de Moscú aporta diez obispos y sus respectivos sacerdotes y seglares, es decir, 30 delegados más, con lo que en total suman 192 participantes en el Concilio, celebrado en la Catedral de Santa Sofía de Kiev.
Al acto, desarrollado en un ambiente tranquilo y plagado de banderas ucranianas, también ha asistido el presidente ucraniano, Petro Proshenko.
La Iglesia del Patriarcado de Moscú denuncia agresiones contra sus sacerdotes y la captura de sus templos por parte de organizaciones «cismáticas». Sin embargo, el Patriarcado con sede en Constantinopla ha anunciado el inicio del proceso de otorgamiento de la autocefalia a la iglesia ucraniana condicionada a la existencia de una sola iglesia unificada que debería surgir del Concilio de Kiev celebrado este sábado.