Más de 150.000 kurdos han huido de sus pueblos en la periferia de la ciudad de Kobani, en la provincia siria de Alepo (norte), desde el inicio de la ofensiva del Estado Islámico (EI) hace casi una semana, informó hoy el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
La ONG agregó que la mayoría de los desplazados han escapado a Turquía.
Kobani es uno de los principales enclaves kurdos en Siria y desde el pasado martes es objeto de una ofensiva de los yihadistas, que han tomado el control de más de 60 localidades de sus alrededores.
El Observatorio destacó que se desconoce el paradero de unos 800 ciudadanos kurdos de esas poblaciones y no descartó que hayan sido asesinados o secuestrados por los radicales.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) informaba ayer de que número de refugiados kurdos del norte de Siria que han llegado a Turquía desde el viernes se acercaba ya a los 90.000.
El EI proclamó un califato en Irak y Siria a finales de junio.
Por la dura oposición que están mostrando, los kurdos, tanto en el territorio sirio como el iraquí, se han convertido en una de las bestias negras de los extremistas suníes.
Los kurdos sirios se concentran, sobre todo, en la provincia de Al Hasaka (noreste) y en las regiones de Afrin y Kobani, también conocida como Ain Arab, así como en Alepo, y suponen el 9 por ciento de la población.