Las disputas entre Honduras y El Salvador no son una novedad y en su momento más álgido tuvieron graves consecuencias.
Fue en 1969 y es conocida por la ‘guerra del fútbol’ como la bautizó el periodista Ryszard Kapuściński. Aquella fue una guerra corta, duró cuatro días, aunque se cobró la vida de más de 2.000 personas entre civiles y militares.
Una reforma agraria que pretendía expulsar a centenares de miles de salvadoreños que trabajaban en las plantaciones bananeras de Honduras -y la consiguiente exaltación patriótica de los medios de comunicación de ambos países, fue el caldo de cultivo para el odio entre ambas naciones que vio su estallido en julio de 1969.
Tras una eliminatoria que servía de clasificación para el Mundial de fútbol de México 1970 que enfrentaba a ambas selecciones nacionales nacionales, y que se decidió en el pais azteca en un partido de desempate a finales de junio del 69 en favor de El Salvador, azuzó al ejército salvadoreño a invadir Honduras.
Al más puro estilo de Woody Allen y su famoso «Cuando escucho a Wagner durante más de media hora me entran ganas de invadir Polonia», el 14 de julio de 1969, el ejército salvadoreño lanzó un ataque contra Honduras y consiguió acercarse a la capital, Tegucigalpa. La Organización de Estados Americanos negoció un alto el fuego que entró en vigor el 20 de julio. Las tropas salvadoreñas se retiraron a principios de agosto.
Las dos naciones firmaron el Tratado General de Paz en Lima, el 30 de octubre de 1980 por el cual la disputa fronteriza se resolvería en la Corte Internacional de Justicia , esta dio paso a la solución negociada del litigio fronterizo por el control de unos 450 kilómetros cuadrados conocido como los bolsones los cuales pasaron a formar parte del territorio hondureño reduciendo de esta forma el territorio salvadoreño.
Isla Conejo
Isla Conejo, es un islote de medio kilómetro de extensión en el Golfo de Fonseca y ambos páises se disputan su posesión. Desde 1983 la zona está ocupada por soldados hondureños que llegaron después de que un destacamento militar de El Salvador la abandonara.
Isla Conejo quedó en ‘tierra de nadie’ tras el la paz de 1980. La isla nunca fue puesta a discusión en la delimitación de las fronteras pues se encuentra a escasos metros de la costa hondureña, muy dentro de su frontera territorial marítima. A pesar de su pequeño tamaño, la isla tiene una gran importancia estratégica para Honduras.
De este modo, la clave de la disputa estaría en el acceso de Honduras al océano Pacífico, pues su única comunicación directa es a través del Golfo de Fonseca donde la soberanía de El Salvador y Nicaragua pone en riesgo su salida a mar abierto.
En 1992, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) resolvió la disputa por los límites territoriales de ambos países. Mientras Honduras dice que la sentencia pone fin a las diferencias, El Salvador alega que se dejó fuera la propiedad de Isla Conejo.
En noviembre de 2013 las cancillerías de ambos países iniciaron una ofensiva diplomática ante la ONU para pelear por sus derechos sobre esta isla. Mientras, Honduras rechazaba las pretensiones salvadoreñas, el canciller de El Salvador defendía la soberanía sobre la isla.