El líder de la Revolución Cubana ha publicado unas reflexiones en la página web del diario »Cubadebate», explicando que decidió solicitar al Pontífice «unos minutos de su muy ocupado tiempo» cuando se enteró a través del ministro de Exteriores, Bruno Rodríguez, «de que le agradaría ese modesto y sencillo encuentro».
Fidel Castro ha recordado que también saludó a Juan Pablo II, «un hombre a quien el contacto con los niños y los ciudadanos humildes del pueblo suscitaba, invariablemente, sentimientos de afecto», ha subrayado.
Informaciones anteriores han apuntado que el encuentro entre el Papa y Fidel Castro podría producirse en la misa multitudinaria que el Santo Padre tiene previsto celebrar a las 9.30 horas (15.30 horas) en la Plaza de la Revolución de La Habana.
Por otro lado, el ex presidente cubano ha reiterado «sin vacilación» que marxistas y cristianos «sinceros», «con independencia de sus creencias políticas y religiosas», deben y pueden «luchar por la justicia y la paz entre los seres humanos».
«Marxistas y cristianos –católicos o no–, musulmanes –chiíes o suníes–, libre pensadores, materialistas dialécticos y personas pensantes, nadie sería partidario de ver desaparecer prematuramente a nuestra irrepetible especie pensante«, ha argumentado.
En este sentido ha denunciado que, «mientras en el planeta un número creciente de personas carecen de vivienda, pan, agua, salud, educación y empleo, las riquezas de la Tierra se malgastan y derrochan en armas e interminables guerras fratricidas», algo que «se ha convertido en una abominable práctica mundial».
En concreto, ha denunciado una vez más el «inhumano» bloqueo comercial impuesto por Estados Unidos a Cuba, al tiempo que ha subrayado que el «glorioso y heroico» pueblo cubano «no ha plegado jamás sus banderas» en su lucha contra «el siniestro imperio». «Ese es nuestro pequeño mérito y nuestro modesto aporte», ha indicado.