Dieciséis rebeldes murieron el sábado en una emboscada tendida por el ejército sirio en la provincia rebelde de Idleb (noroeste), informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
«Deiciséis combatientes de grupos de desertores murieron en un emboscada cerca de la ciudad de Jisr al Shugur cuando se dirigían a la ciudad de Idleb» dijo a la AFP Rami Abdel Rahmane, presidente del OSDH. El Observatorio informó además que cuatro soldados del ejército sirio resultaron muertos y cinco capturados por los rebeldes en otro enfrentamiento en Idleb.
Bombardeos desde la mañana
El ejército sirio bombardeaba violentamente este sábado la ciudad rebelde de Idleb (noroeste), como preludio a un asalto de envergadura, pocas horas antes de la visita a Damasco del emisario internacional para Siria, Kofi Annan, informaron una ONG siria y militantes.
«Se trata de los bombardeos más violentos desde el envío de tropas de refuerzo esta semana a Idleb. Es el preludio a una toma de la ciudad», indicó a la AFP Rami Abdel Rahmane, jefe del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
«El bombardeo comenzó a las 05H00 de la mañana (0H300 GMT). Son bombardeos muy violentos«, indicó de su lado Milad Fadl, militante local de la Comisión general de la revolución siria. «Tres edificios han sido derribados ya al oeste de la ciudad. Las fuerzas del régimem bombardean las afueras y varias carreteras», indicó.
El viernes la violencia dejó al menos 50 civiles muertos en Siria. Según el OSDH. La ofensiva más sangrienta se produjo en Idleb, en donde al menos 24 civiles murieron.
El ejército tomó en la mañana del viernes por asalto varias poblaciones de esta provincia de Idleb y «lanzó una campaña de allanamientos en las ciudades de las zonas agrícolas y persiguió a los desertores», según la ONG.