El Departamento ha desvelado en un breve comunicado que ambos han mantenido una conversación telefónica en la que Pompeo ha mostrado la disposición de Washington de «ayudar a su Gobierno (de Abdul Mahdi) a lograr estabilidad, seguridad y prosperidad para todos los iraquíes».
Abdel Mahdi fue nombrado como primer ministro designado el martes, apenas dos horas después de que el Parlamento eligiera a Salí como nuevo presidente del país.
Según la Constitución del país asiático, Abdul Mahdi contará con 30 días para formar un Ejecutivo y presentarlo al Parlamento para su aprobación, en medio de las diferencias en el Parlamento entre las principales coaliciones, lo que ha aplazado la formación de Gobierno desde la celebración de elecciones generales en mayo.
El influyente clérigo chií iraquí Muqtada al Sadr, cuya coalición se hizo con la victoria en las parlamentarias, ha reclamado este mismo jueves a los miembros de su bloque parlamentario que no acepten cargos en ministerios en el nuevo Gobierno y ha dado un año de margen al nuevo Ejecutivo para aplicar reformas.
Al Sadr ha subrayado durante la jornada que la coalición Sayirun ha hecho esfuerzos para lograr «un primer ministro independiente» y «libre de la corrupción del anterior Ejecutivo».
«Hemos ordenado que este Gobierno sea creado sin presiones partidistas, sectarias o étnicas mientras se preserva el bello mosaico iraquí», ha dicho, antes de resaltar que para ello ha pedido a su bloque parlamentario que no sea parte del mismo.
Asimismo, ha manifestado que dará «un año» de margen al nuevo primer ministro designado, Adel Abdul Mahdi, para demostrar que es capaz de sacar adelante una agenda de reforma y mejorar la situación socioeconómica en el país.
Por último, Al Sadr ha felicitado al kurdo Barham Salí por su elección como nuevo presidente de Irak. En este sentido, le ha deseado «muchos éxitos» en el cargo, según ha recogido la cadena de televisión local Al Sumaria.