Jared Leto lo ha vuelto a hacer. Se ha convertido en el más original de la noche de los Oscar. El actor dejó a todos con la boca abierta en la alfombra roja y posó con un traje blanco y pajarita roja.
Además, el líder de 30 Seconds to Mars decidió dejar su melena al viento en lugar de recogérselo en un moño como en otras ocasiones y pasó como alma que carga el diablo por el photocall, poco dado como siempre a posar para los medios. Llegó acompañado por su madre.
Guapísimo como siempre, Jared está nominado a mejor actor de reparto por su papel de travesti en »Dallas Buyers Club», y ya ha conseguido alzarse con casi todos los premios importantes de los últimos meses.
Pero Leto no fue el único y parece que el blanco se ha puesto de moda este año entre los actores, que han dejado el esmoquin clásico en casa. El protagonista de la cinta, Matthew McConaughey, que también está nominado como mejor actor principal, eligió el blanco para su esmoquin, como Jared Leto. Acompañado por su mujer y su madre, el actor fue uno de los más atractivos con chaqueta blanca, chaleco negro y pajarita. El pelo, cortito y bien peinado le convierten en el gran favorito de la noche y, junto a su esposa, la pareja más bella de la noche del cine »made in USA».