Kazajistán ocupa el séptimo puesto del medallero, con tan solo seis medallas, supera a Alemania que tiene 22 medallas o incluso a Rusia que tiene 35, pero nadie de la Organización de los Juegos se ha equivocado, es que todas las medallas del país ex sóvietico son de oro. En efecto, cada vez que un atleta kazajo ha subido al podium, ha sido en el más alto escalón y para escuchar su himno, el septimo que más se ha a oído en las gradas de Londres.
Empezaron muy bien con la victoria de uno de sus mejores deportistas de todos los tiempos: Alexandre Vinoukourov, ciclista conocido por el gran público por sus victorias en el Tour de France, con el equipo Astaná, capital que le da nombre al equipo a modo de sponsor turístico. Vinokourov se impusó en la primera final de los Juegos, la de ciclismo en ruta cuando resolvió magistralemnte en la escapada ganando al colombiano Rigoberto Urán.
Después el empujón definitivo se produjo cuando entró en liza la halterofilia, en la que consiguieron 4 oros, Ilya Ilyn campeón en la categoría masculina de 94 kg, Zulfiya Chinshanlao en mujeres de 53 kg, Maiya Maneza, campeona en 63kg y Svetlana Podobeova de mujeres de 75kg.
Y esta tarde se ha producido otro motivo de alegría para el pueblo kazajo, la saltadora Olga Rypakova ha ganado en triple salto, llevando esa sexta medalla de oro al medallero y posicionando a su país entre los 10 primeros de las Olimpiadas.