Justin Bieber está de gira por Estados Unidos y, como es un buen amigo, decidió dejar su casa a dos de sus íntimos para que hicieran una fiesta. Sus inseparables amigos Lil Twist y Lil Za estuvieron viviendo en la casa que Bieber tiene en Calabasas, California.
Durante esas semanas, los dos artistas aprovecharon para organizar fiestas y momento en que desaparecieron valiosas joyas del ídolo adolescente.
Según el portal TMZ, Justin Bieber no ha acusado directamente a los raperos del hurto, pero sí de ser responsables de dejar entrar a gente desconocida en su casa durante su ausencia y no vigilar lo que hacían.
Fuentes cercanas al cantante han revelado que Justin entró en cólera cuando se enteró del robo y que echó a sus amigos negándoles la entrada a su casa ya que el dúo de raperos no está dispuesto a asumir la culpa de las joyas desaparecidas.
Parece que este podría ser el final de la buena relación entre el cantante de »Baby» y los dos raperos, ya que Bieber está completamente indignado con la actitud de los dos artistas, que no piensan reconocer su culpa.