Los agricultores denuncian que la falta de limpieza del Ebro agrava las inundaciones. Desde el Departamento técnico de la Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (Asaja), Goyo Juárez, señala que el caudal del rio tampoco es tan brutal “como para haber provocado estos daños en tantas hectáreas», por lo que atribuye la situación a la falta de limpieza del río. «Cada año se desborda el río por más sitios, y con menos agua que hace unos años, porque el río es cada vez más estrecho» por la acumulación de maleza, ha añadido.
Desde Ecologistas en Acción señalan que la limpieza del rio no es la solución. Los dragados, los embalses y las motas de contención no son la solución para las crecidas del río Ebro y para evitar «un problema provocado por la falta de previsión», señalan desde esta organización.
«Los dragados, embalses y motas no son la solución para evitarlo. Se trata más bien de un problema de ordenación del territorio y de la necesidad de aprender a convivir con las dinámicas naturales del río», defiende el secretario de Aguas de Ecologistas en Acción, Santiago Martín.
Martin se muestra contrario con la idea de las “limpiezas” en el cauce o se adopten medidas constructivas e incluso cambios legislativos. «Estas medidas producirían, sin lugar a dudas, graves daños medioambientales, con importantes alteraciones en el ecosistema fluvial», ha advertido Ecologistas en Acción, que, además, las ve «de escasa utilidad para la lucha contra las crecidas impetuosas de los ríos, las avenidas y pueden llegar a ser incluso contraproducentes».
Desde el CHE destacan que desde el año 2007 hay varias propuestas encima de la mesa que se han ido desarrollando pero que las diferentes legislaciones que hay que cada punto del Ebro están dificultando llevarlas a cabo. En algunas zonas se ha podido limpiar mas parte del rio que en otras porque ahí lo permitía la ley. Esperan que este viernes en el Consejo de Ministros en las medidas extraordinarias que vaya a anunciar el Gobierno de aborde el problema del Ebro de manera integral.
“El rio Ebro es muy complejo por muchas cosas, no es igual en todas las partes de su recorrido y en la zona donde da más problemas que es la zona media no se pude hacer muchas cosas por la geografía que hay. Tenemos que preguntarnos ¿Qué río queremos? Y a partir de ahí comenzar a poner en marcha las soluciones”, concluyen desde el CHE.