Ossa de Montiel, la localidad albaceteña que esta tarde registraba un terremoto de 5,2 grados en la escala Richter, se encuentra en el radio de un proyecto de fracking para la extracción de gas natural que en los próximos meses podría iniciarse en la comarca.
Un proyecto controvertido y que lleva tiempo generando rechazo entre los vecinos, que advierten del “grave riesgo para el medio ambiente y la salud humana” que podrían suponer estas técnicas. En el perímetro diseñado para estas prospecciones se localiza el Parque Natural de Las Lagunas de Ruidera que temen pueda verse afectado por la contaminación de aguas.
El proyecto fue adjudicado en septiembre de 2012 por la Consejería de Industria de Castilla La Mancha a la empresa Oil and Gas Capital, con la concesión de tres permisos de investigación de hidrocarburos-“Esteros”, “Almorada” y “Nava”– para la búsqueda de gas de pizarra y gas de arenas compactas. Según el documento de adjudicación, el proyecto abarca los términos municipales de Alhambra, en la provincia de Ciudad Real; Viveros, Villarrobledo, Munera, Ossa de Montiel, El Bonillo, Lezuza, Tiriez y El Ballestero, en la provincia de Albacete, con un total de 46.000 hectáreas. La inversión alcanza los 5»2 millones de euros.
Las técnicas empleadas serían la perforación horizontal, la inyección de líquidos oleaginosos, la agrupación de muchos pozos por plataforma y la fractura hidráulica. La empresa Oil and Gas Capital, cuyo consejero delegado es Fulgencio Jiménez, exdirector de exploración de Repsol, tiene además permisos concedidos en Asturias, Murcia, Valencia y Andalucía. En esta última, la Junta le concedió tres permisos en 2012 y tiene otros seis en fase de otorgamiento.
Se desconoce si el terremoto registrado hoy podría alterar estas prospecciones. La compañía se ha desvinculado del temblor y ha informado de que aún no se había iniciado ningún sondeo. Según la concesión, la compañía operaría los trabajos durante seis años, divididos en varias fases. En las dos primeras, se realizarían estudios geológicos y de mercado, mientras que en la tercera tendría ya lugar la primera perforación.