La patronal de las agencias privadas de empleo, Asempleo, ha publicado un informe en el que afirma que el descenso de la población activa en España que se registró en el segundo trimestre de este año no sólo se debió a causas demográficas como la baja natalidad de nuestro país.
Según este análisis, se está produciendo un fenómeno de retorno de los jóvenes extranjeros de entre 25 y 35 años de edad que residen en España, como consecuencia de la escasez de oportunidades laborales que ofrece actualmente nuestro mercado de trabajo.
En el segundo trimestre del año la población activa cayó un -1% en términos interanuales. Esa caída de la población activa se explica prácticamente en su totalidad por el colectivo de personas de entre 25 y 35 años: en este tramo de edad la caída interanual de la población activa se elevó al -5,2%.
Estos datos no son consecuencia de que estos jóvenes hayan dejado de ser activos laboralmente hablando, porque hayan decidido participar en algún programa de formación o porque hayan dejado de buscar activamente empleo por el denominado efecto desánimo. Sino que se debe, subraya el informe de Asempleo, a una disminución de la población en ese tramo de edad (-5,5% interanual).
Son algunas reflexiones recogidas en la edición de septiembre del Monográfico del Mercado Laboral, elaborado por el grupo Afi (Analistas Financieros Internacionales) junto a la asociación Asempleo, formada por las principales agencias privadas de empleo de nuestro país, como Adecco, ManpowerGroup, Randstad, Eulen, Grupo Norte, Unique o Page Personnel (Grupo Michael Page), entre otras.
Datos positivos, pero no suficientes
El informe señala que la recuperación del mercado de trabajo continúa, aunque prevé registros de empleo peores en los últimos meses del año. No obstante, 2014 terminará con unos 300.000 ocupados más, con un crecimiento interanual del 1,7%.
Además, en los datos publicados hoy por Eurostat, la oficina europea de estadística, se refleja que España triplicó la creación de empleo de la Unión Europea en el segundo trimestre del año.
Pero el informe de Asempleo y Afi también señala que el ritmo de recuperación de empleo debe ser mucho mayor para alcanzar los objetivos europeos.
Esta publicación destaca que el descenso de jóvenes en edad de trabajar en España puede acarrear problemas para la recuperación de la actividad económica, porque supone la descapitalización del país: «Aun cuando la propia evolución demográfica implica un descenso progresivo de la población joven, esta reducción tiene más que ver con su marcha a otros países que ofrecen más oportunidades laborales. Un proceso que, de tener continuidad en los próximos meses, podría llegar a suponer la descapitalización de la economía española, clave en el proceso de recuperación de la actividad productiva».
Desempleo y sobrecualificación
En la publicación de Asempleo y Afi se explica que la pérdida de jóvenes en la población activa se debe principalmente al retorno de personas de origen extranjero que llegaron a España en busca de salidas laborales y que, ante la falta de ofertas de empleo, ahora regresan a sus países de origen o se trasladan a otros con más oportunidades de trabajo. El perfil tipo en el descenso de la población activa sería el de una persona casada y de nacionalidad extranjera.
El informe, no obstante, también indica que los jóvenes solteros de nacionalidad española en este tramo de edad de 25 a 35 años también están ganando peso en la emigración hacia otros países.
Según el análisis de Asempleo y Afi, dos situaciones explican las caudas de la marcha de los jóvenes a otros países. Por un lado, el alto nivel desempleo (del 26,5% en ese tramo de edad, 2 puntos porcentuales por encima de la media nacional); y por otro, la excesiva sobrecualificación que presentan estos jóvenes. El 57,4% de los ocupados de esas edades tiene un puesto de trabajo que requiere una preparación inferior a su nivel de estudios. Entre los más formados, quienes tienen estudios superiores, el porcentaje de los que ocupan una posición inferior a su formación es del 26,4% en este tramo de edad.
Los que más emigran
Y es que los trabajadores de este tramo de edad tienen un nivel de formación por encima de la media de la población activa: el 41,3% tiene estudios superiores frente al 26,9% en el conjunto de los trabajadores. Esta circunstancia, señala el informe, junto a su menor arraigo a un lugar porque apenas acaban de emanciparse y muchos de ellos no han comprado una vivienda o han formado una nueva familia, explicaría que este colectivo sea el que registre la mayor movilidad geográfica laboral entre todos los grupos de edad.
Los jóvenes en esta franja de edad son los que más se desplazan por motivos laborales, tanto a otras provincias: el 13,8% de ellos encontraron un puesto de trabajo el pasado año en una provincia distinta a la de su residencia habitual; como a otros países: el 2,6% de la población en esa edad emigró fuera de España en 2013.