El domingo Grecia celebra nuevamente elecciones, y los ojos de medio mundo estarán puestos sobre un país que representa, apenas, el 2% del PIB europeo. Y sin embargo el debate sobre una nueva ‘quita’ (condonación de la deuda) y el miedo a una ruptura de la eurozona, mantiene en vilo a los expertos. El euro se pone en cuestión por la posible victoria del partido de izquierdas Syriza. Sin embargo, su líder se ha reafirmado en su intención de mantener al país en la eurozona.
Sería imposible imaginar en Atenas, un triunfo de Syriza si en su programa figurara el ‘Grexit‘. «El apoyo de los griegos al euro es todavía más alto que antes de la crisis, y más alto que en los años previos a la entrada. Ahora los griegos se preguntan si los alemanes los echarán del euro», ha señalado Evangelos Liaras, en un debate organizado por el Real Instituto Elcano.
Y es que «únicamente un 18% de los alemanes quieren que los griegos permanezcan en el euro», ha afirmado Irene Martín, profesora de Ciencia Política de la UAM, que también ha participado en la mesa. Martín recordó que el líder de Syriza ha llegado a escribir una carta a los ciudadanos alemanes para explicarles que bajo las condiciones actuales «Grecia no puede pagar su deuda«.
Es la otra cara de la moneda porque, entre otros motivos como los geoestratégicos y militares (proximidad con Turquía), “los griegos asocian la salida del euro con el desorden y el caos”, cree el economista, José Carlos Díez. «Estar en el euro es para muchos países un ancla de seguridad, de estar en el corazón de Europa», afirmó también el investigador del Real Instituto Elcano, Federico Steinberg.
Ignacio Molina, investigador del Real Instituto Elcano, tampoco cree que si Francia e Italia «no han podido moldear a Alemania, mucho menos lo va a poder hacer Grecia». «No hay que esperar que un gobierno de Syriza vaya a cambiar mucho las cosas, no hay que esperar un escenario catastrófico ni grandes cambios, sino pequeños cambios tras una negociación política», dijo Molina.
Un punto de vista en el que han coincidido todos los participantes. Tras las elecciones Grecia deberá comenzar a negociar con la troika las condiciones de salida del segundo rescate y probablemente se pacten cambios con respecto a los memorándums firmados. Como mucho, los expertos creen que se reestructurarán plazos e intereses pactados, pero no habrá ‘quita’ ni aunque triunfe Syriza.