La deuda de los partidos políticos con las entidades financieras ascendía principios de 2013 a 237,6 millones de euros. IU, Unió Democràtica de Catalunya (UDC) y la propia federación de Convergència i Unió (CiU) encabezan la lista de formaciones políticas que están en situación de quiebra técnica desde hace cuatro años.
Pese a que a nivel jurídico el trato al que se le debería someter a estas formaciones sería el mismo que el ejercido a cualquier particular, los expertos consultados por Teinteresa.es argumentan que los bancos les dan una situación de favor porque ejercen sobre ellos intereses que desbordan lo económico. “Si sabe que no van a cobrar, controlan el partido y si no a las empresas privadas a través de las que se financian”, declara el profesor de Economía de la Universidad CEU San Pablo, José Villacís.
“Los partidos políticos están influenciados por unos elementos que transciende la realidad económica. Alguien puede iniciar un procedimiento contra el partido porque no paga la deuda pero dada la carga del partido se evita que se lleve a cabo”, coincide en señalar el profesor de Economía de la Universidad Rey Juan Carlos, Antonio Martínez.
Esta situación puede prolongarse hasta que la estructura institucional lo permita. “Indefinidamente”, añade Villacís. Algo impensable en el caso de una empresa o un particular puesto que existe un móvil ligado a la eficacia en la producción y a la subsistencia dentro del sistema.
Además, aunque en la teoría no debería estar económicamente justificado continuar concediéndoles préstamos a una institución en situación de quiebra técnica en la práctica se sigue dando crédito a los partidos políticos. “Los bancos les dan dinero a sabiendas de que no podrán devolverlo. Para seguir fomentando el trato de favor”, explica el profesor Martínez.
¿Quién pagará esta deuda? Cuando el mercado no responde con sus propias reglas dentro de la oferta y demanda y los agentes participantes no asumen sus riesgos y consecuencias es el ciudadano el que con impuestos y cargas fiscales paga este endeudamiento. “Este tipo de fallos los pagaremos todos y con actuaciones de carácter fiscal como recortes que llevan asociadas ese tipo de malas prácticas”, afirma Martínez.
Ambos expertos coinciden en señalar que a la larga se les condonará este pago y que como no tienen patrimonio para devolverla seguirán endeudándose.